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El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, se refirió nuevamente al caso ocurrido el pasado domingo en la ciudad de Nuevo Laredo, en Tamaulipas, donde elementos del Ejército dispararon en contra de siete jóvenes, hiriendo de muerte a cinco.
Al respecto, el mandatario insistió que no habrá impunidad en el caso, aún cuando versiones extraoficiales aseveran que las víctimas era integrantes de uno de los grupos criminales con más poder en la región, el Cártel del Noreste.
“Aunque se trate de supuestos sicarios, no se debe de permitir la ejecución de nadie“, indicó el jefe del Ejecutivo durante su conferencia habitual de este jueves. “No se permite la violación a los derechos humanos en nuestro Gobierno”, agregó, al revelar que la Secretaría de la Defensa ya está procediendo conforme a la disciplina militar, mientras que la Fiscalía avanza en las investigaciones pertinentes.
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