El gobierno panameño ha sancionado a las empresas de generación y distribución de energía eléctrica por las deficiencias en la prestación de su servicio.
Los sectores populares exigen medidas más fuertes ante el incremento constante en los precios de la electricidad.
El incremento de la tarifa eléctrica en Panamá ha movilizado a distintas organizaciones a reclamar la acción concreta de las autoridades para hacer frente a una problemática que repercute de manera particular en los sectores más necesitados.
Pero el impacto no solo viene desde los altos costos, sino también en la calidad del servicio que reciben los consumidores.
Con la Ley 6 de 1997 parte de las actividades de generación, distribución y comercialización de la energía eléctrica dejaron de estar manejadas solamente por el sector público, permitiendo el ingreso de empresas privadas.
Mientras agrupaciones de consumidores exigen la modificación de las leyes que regulan a estas empresas, la Autoridad Nacional de los Servicios Públicos (ASEP) las ha sancionado con multas millonarias en el reciente mes de julio debido a la deficiencia en la prestación de sus servicios.
John Alonso, Ciudad de Panamá.
kmd/hnb