Cuba tiene la disposición de sentarse con EE. UU. basada en el respeto a la soberanía, la autodeterminación y la no injerencia en los asuntos internos.
El Gobierno de Cuba está listo para dialogar con EE. UU. siempre y cuando sea en el marco de respeto a la soberanía y la no injerencia en los asuntos internos de la mayor de las Antillas.
Estas afirmaciones se producen a pocas semanas de que asuma el cargo el presidente republicano Donald Trump, quien durante su primer mandato frenó el histórico acercamiento entre ambos países iniciado hace apenas diez años antes por el demócrata Barack Obama.
En rueda de prensa desde La Habana, el vicecanciller cubano rechazó asimismo la decisión de Washington de mantener otro año más a la nación antillana en la lista de países que patrocinan el terrorismo, lo que conlleva una serie de sanciones para la isla
Durante la última década, los lazos bilaterales se han caracterizado, de acuerdo con el viceministro cubano, por cuatro realidades: La Habana cumplió t/mkhodos sus compromisos, buscando el progreso, mientras que Washington incumplió prácticamente todos los suyos.
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