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La lideresa de Tupac Amaru está en prisión domiciliaria desde 2017.
Organizaciones sociales y activistas de derechos humanos realizan este jueves una caravana para reclamar la libertad de la dirigente Milagro Sala, quien desde 2017 cumple prisión domiciliaria, informaron medios locales.
La convocatoria inició desde la Casa de las Madres de Plaza de Mayo, en el barrio de Congreso en Buenos Aires, para terminar en el domicilio donde Sala cumple prisión domiciliaria, ubicado en la ciudad de La Plata.
Organizaciones sociales, políticas y organismos de derechos humanos realizan una caravana por la libertad de la líder de la Tupac Amaru, Milagro Sala, al cumplirse 9 años de haber sido detenida ilegalmente en la provincia de Jujuy. Los activistas reclaman el cese del… pic.twitter.com/SqcmsCJDqh
— Carolina Silvestre💚 (@CaroSilvestre) January 16, 2025
En la manifestación, compuesta mayormente por mujeres, se movilizan con carteles y fotografías de Sala, lideresa de la organización política Tupac Amaru que fue detenida un 16 de enero, pero de 2016, cuando protestaba contra el Gobierno de Jujuy.
“La represión, detención y persecución sistemática de manifestantes, activistas y referentes populares forman parte de un plan destinado a silenciar al pueblo trabajador, con el objetivo de profundizar un ajuste que solo favorece a los sectores concentrados de la economía”, dijo Hugo ‘Cachorro’ Godoy, secretario general nacional de la Central de Trabajadores (CTA).
Por su parte, el Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS) indicó que “el hostigamiento de todos estos años deterioró la salud de Milagro” y por eso seguirán reclamando su libertad.
Una “presa política”
Entrevistada por la radio 750, Sala apareció con un cuello ortopédico producto de las diversas intervenciones a las que se ha sometido en los últimos por una trombosis. “Estoy tomando bastantes pastillas y eso me está complicando”, contó.
“A mí me costó mucho entender por qué pasé a ser una presa política. Porque no tenía la dimensión que iba a ser tan visceral. Que iba a ser tan fuerte de meterse con la familia, de destruir todo lo que se armó”, afirmó, citada por Página 12.
En diciembre de 2022, la Corte Suprema de Argentina confirmó una condena de 13 años de cárcel contra la dirigente social por supuestamente haber liderado una banda delictiva, defraudado al Estado y extorsionado a cooperativistas.