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La víctima identificó el bóxer como suyo y así inicio la travesía judicial que podría desencadenar una condena.
Un joven de 26 años enfrenta este viernes un juicio en el Tribunal Oral Criminal (TOC) N°1 de la ciudad argentina de La Plata, acusado de robar un calzoncillo usado, informaron este viernes medios locales.
Franco Alejandro Robledo, quien estuvo más de un mes detenido, está imputado por forzar una cerradura, romper un vidrio y sustraer dos relojes, 20.000 pesos [alrededor de 20 dólares], una calza deportiva, una camiseta y un bóxer, el pasado 11 de septiembre.
No obstante, cuando fue capturado a pocas cuadras del lugar tenía solamente un calzoncillo, que la víctima identificó como propio, aunque Robledo, quien no tiene antecedentes penales, aseguró que era suyo.
De hecho, Robledo está libre desde el 24 de octubre de 2024 bajo promesa de buena conducta. Sin embargo, afronta una pena de hasta 10 años de cárcel, con un mínimo de 3 años, que podría ser de ejecución condicional.
Su abogado, Ignacio Fernández Camillo, pedirá que se anule el juicio porque la única prueba clave, el bóxer en cuestión, fue devuelto al denunciante sin que pasara la prueba de ADN ordenada por un juez, lo que rompió la cadena de custodia.
En opinión de Fernández, al no poder hacer la pericia sobre el calzoncillo, no se podrá determinar la propiedad de la prenda y, por ende, el caso podría terminar en la nulidad del juicio.
