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Según Bloomberg, la política obstaculiza los esfuerzos de la UE por competir con EE.UU. y Asia, por lo que podría verse significativamente limitada.
La Comisión Europea ha propuesto suavizar los criterios ambiental, social y de gobernanza (ESG, por sus siglas en inglés ‘environmental, social and corporate governance’) o incluso cancelar algunas regulaciones para proteger los intereses empresariales, ya que la agenda verde se ha convertido en un “peso muerto que obstaculiza los esfuerzos de la Unión Europea (UE) por competir con EE.UU. y Asia”, informó Bloomberg el lunes.
La propuesta abarca ámbitos que van desde los requisitos de información ESG hasta la gestión de la cadena de suministro y la posible cancelación de la responsabilidad jurídica en caso de infracciones medioambientales, señala la agencia, según la cual la decisión final podría darse a conocer el miércoles. Se espera que los requisitos se reduzcan principalmente para las pequeñas y medianas empresas.
La comisión también propone que las estrictas normas ecológicas solo se apliquen plenamente a las empresas con más de 1.000 empleados e ingresos anuales superiores a 470 millones de dólares.
Alemania y Francia, las dos mayores economías de la UE, están ejerciendo una fuerte presión a favor de la medida, ya que ambos países reaccionan ante el descenso de la productividad económica, según el medio de comunicación.
En Francia, la crisis ha llegado tan lejos que el Gobierno califica de “infierno” para las empresas las normas de ESG, indica Bloomberg. La agencia también señala las probables consecuencias de suavización de la política, ya que Europa representa más del 80 % de los activos mundiales de fondos ESG.
Mientras, la decisión puede deberse a que las empresas estadounidenses han entrado en una “nueva era de desregulación” bajo el mandato del presidente Donald Trump, crítico con el apoyo de la agenda verde por su predecesor Joe Biden. Además, en sus primeros días en el cargo, el político hizo de los aranceles la base de su política comercial. Como consecuencia, la UE se ha enfrentado a la presión de Washington y a las llamadas a relajar sus normas ESG.
La posible medida de la comisión ya está causando descontento entre grupos de la sociedad civil. Maria van der Heide, jefa de política de la UE en la organización británica ShareAction, afirmó que la cancelación planificada de las regulaciones ESG parece “temeraria”. También señaló que las leyes de sostenibilidad “están siendo eliminadas a puerta cerrada y a una velocidad récord”. En su opinión, eso no es simplificación, es “pura desregulación”.
