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Necesitan de los datos de la Inteligencia estadounidense para alcanzar sus objetivos en territorio ruso.
Los misiles británicos de largo alcance Storm Shadow podrían quedar inutilizables para Ucrania, luego de que el presidente estadounidense, Donald Trump, detuviera esta semana el envío de datos de inteligencia al régimen de Kiev, recoge el Daily Mail.
Aunque Washington continuará suministrando información a sus aliados, el medio señala que se le ha prohibido al Reino Unido compartir estos datos con Kiev, lo que puede tener grandes repercusiones para el Ejército ucraniano. En el caso específico de los Storm Shadow, necesitan los datos estadounidenses para poder alcanzar sus objetivos en el interior de Rusia.
Estos misiles son desarrollados conjuntamente por el Reino Unido y Francia. Se dice que cada uno tiene un valor de 2 millones de libras (más de 2,5 millones de dólares) y, según indica el diario, de los casi 600 con los que cuenta el arsenal británico, cientos han sido entregados a Ucrania desde el inicio del conflicto, en el 2022.
La decisión de suspender el envío de información a Ucrania se produjo luego de pausar el suministro de ayuda militar. Estas medidas fueron implementadas por la Casa Blanca para ejercer presión sobre el líder del régimen de Kiev, Vladímir Zelenski, luego que se mostrara opuesto a negociar un cese el fuego con Rusia.
Mientras tanto, los líderes europeos continúan insistiendo en prolongar el conflicto, al seguir armando a Ucrania y hacer una inversión más grande en su asistencia. Este jueves, el secretario de Defensa británico, John Healey, intentará convencer a su homólogo estadounidense, Pete Hegseth, de reanudar el apoyo a Kiev.
