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El mal tiempo y los oleajes anómalos en la costa peruana, viene ocasionando el desabastecimiento del Gas Licuado de Petróleo (GLP) en todo el país, debido a que este producto no se puede embarcar desde la plataforma marítima de la empresa Pluspetrol (Paracas) a la refinería de la Pampilla ubicada en la ciudad de Lima.
Debido a esta situación, cientos de camiones cisternas llegan a diario al distrito de Paracas para abastecerse con el GLP, demorando entre 24 o 36 horas para cargar el combustible, usando los espacios que se ubican a los costados del kilómetro 14 de la carretera Pisco – Paracas como zona de parqueo para sus unidades.
Esta peligrosa situación se viene prolongando desde hace 20 días ante la vista y paciencia de las autoridades, quienes al parecer no miden el peligro que estas unidades representan en caso de un accidente de tránsito, por su continuo ingreso y salida a la planta de fraccionamiento ubicada en playa Lobería.}
“Anteriormente, ya se han producido accidentes en esta zona, donde autos han impactado contra los camiones cisternas en horas de la noche, debido a que es un lugar oscuro y desolado”, dijo un conductor de los colectivos que cubren el servicio al distrito de Paracas.
Se calcula que esta situación se podría prolongar por una semana más, tiempo en que se seguirán observando las enormes colas de cisternas esperando su turno para cargar el GLP y llevarlo a las embazadoras que se ubican en los veinticuatro departamentos del Perú.
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