Investigadores han impreso en 3D un dispositivo que imita el funcionamiento de cinco órganos del cuerpo humano y podría ser la solución para probar medicamentos y cosméticos en animales.
Personas por el Trato Ético de los Animales (PETA), una organización no gubernamental centrada en los derechos de los animales, estima que, sólo en los laboratorios de los Estados Unidos de América, más de 100 millones mueren cada año. Ratas, ranas, perros, conejos, monos, peces y pájaros son sometidos a pruebas para el desarrollo de medicamentos y cosméticos.
En el caso de los medicamentos, muchas agencias reguladoras de todo el mundo exigen pruebas de toxicidad en animales antes de pasar a los humanos. Sin embargo, nueve de cada 10 medicamentos que pasan a ensayos clínicos en humanos fracasan porque no son seguros ni eficaces.
Por ello, y porque se trata de una práctica éticamente reprobable, un grupo de científicos en Escocia desarrolló un nuevo dispositivo impreso en 3D para probar medicamentos. Esto podría acelerar el acceso de los pacientes a nuevos tratamientos y eliminar la necesidad de realizar pruebas con animales.
Cuerpo en chip Podría poner fin a las pruebas de drogas en animales
Investigadores de la Universidad de Edimburgo han diseñado un innovador cuerpo en chip, un pequeño dispositivo de cultivo de microfluidos que recrea las complejas estructuras y funciones de varios órganos humanos vivos. Sus creadores afirman que es el primero de su tipo en el mundo.
![Un nuevo dispositivo impreso en 3D podría poner fin a las pruebas de drogas en animales 24 IdesoTV | Noticias del Peru y el Mundo El dispositivo de plástico creado por investigadores de la Universidad de Edimburgo, Escocia. Crédito: Murdo MacLeod/The Guardian](https://noticiasrtv.com/wp-content/uploads/2023/12/1703770344_740_Un-nuevo-dispositivo-impreso-en-3D-podria-poner-fin-a.jpg)
El dispositivo de plástico creado por investigadores de la Universidad de Edimburgo, Escocia. Crédito: Murdo MacLeod/The Guardian
El dispositivo fue diseñado en plástico con una impresora 3D, con cinco compartimentos que reproducen el corazón, los pulmones, los riñones, el hígado y el cerebro. Todos los "órganos" están conectados por canales que imitan el sistema circulatorio humano y reproducen el flujo de un medicamento a través del cuerpo del paciente.
Esto nos permite ver en qué parte del cuerpo va un nuevo medicamento y cuánto tiempo permanece allí, sin tener que utilizar un humano o un animal para probarlo.
El líder del equipo, Liam Carr, explicó a The Guardian que la plataforma es completamente flexible, lo que significa que puede ser una herramienta para investigar diversas enfermedades humanas, como el cáncer y enfermedades cardiovasculares, neurodegenerativas o autoinmunes.
Este dispositivo muestra un gran potencial para reducir la gran cantidad de animales utilizados en todo el mundo para probar medicamentos y otros compuestos.
Adriana Tavares, del Centro de Ciencias Cardiovasculares (CVS) de la Universidad de Edimburgo, explicó, destacando que la clave del éxito del sistema es la unión de cinco órganos en un solo dispositivo.