Un informe revela un aumento del 340% en los incidentes contra Israel entre 2022 y 2024, atribuido principalmente a la guerra genocida en Gaza, que intensificó los discursos y actitudes contrarias a nivel global.
El análisis, emitido por la Organización Sionista Mundial y la Agencia Judía, y publicado el martes por el Jerusalem Post, indicó que todos los países incluidos en la encuesta presenciaron un aumento notable en el número de hechos anti-israelíes, especialmente los vinculados a la retórica antisionista y las políticas llevadas a cabo por el régimen de Tel Aviv en la región.
Estos incidentes se intensificaron significativamente tras el comienzo en 2023 del genocidio en Gaza, y los posteriores crímenes de guerra perpetrados por Israel contra el pueblo palestino.
En Estados Unidos, hubo un aumento de casi el 300 por ciento de los incidentes contra el régimen israelí, alcanzando su punto máximo en abril de 2024.
En Canadá, el aumento fue “aún más alarmante”, y ronda en un incremento del 562 por ciento, con aproximadamente una cuarta parte de los actos “violentos”.
Según el periódico, en Sudáfrica se registró un aumento de al menos 185 puntos porcentuales, con claras expresiones de hostilidad hacia Israel, acompañadas de llamamientos a boicotearlo y de difusión de propaganda antisionista.
En Asia, el informe documenta el nacimiento de tendencias llamadas “nuevo anti-israelismo” en China, Japón y Taiwán, con un aumento del contenido hostil en las plataformas de redes sociales chinas, así como manifestaciones contra el régimen sionista en Japón y Taiwán. El estudio también indicó un aumento significativo del sentimiento anti-israelí en internet.
Israel perpetró durante más de quince meses masacres diarias contra la población en Gaza, que causaron la muerte de al menos 47 035 civiles, la inmensa mayoría mujeres y niños. También autoridades sanitarias de la Franja revelan una cifra de 111 091 personas heridas. Miles de víctimas siguen atrapadas bajo los escombros.
Lo anterior provocó un intenso rechazo internacional y condenas de múltiples países y organizaciones políticas y no gubernamentales al genocidio israelí contra palestinos.
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