El ministro iraní de Petróleo afirma que EE.UU. nunca logrará su sueño de reducir a cero las exportaciones de petróleo de Irán, como lo ha proclamado Trump.
“Bloquear las exportaciones de petróleo de Irán es un sueño inalcanzable”, ha subrayado este domingo el ministro iraní de Petróleo, Mohsen Pakneyad, al reaccionar a la reciente firma de una orden ejecutiva por parte del presidente de EE.UU., Donald Trump, para imponer la máxima presión sobre la industria petrolera de Irán.
El ministro ha insistido en que Irán siempre encontrará soluciones para eludir las prohibiciones estadounidenses a sus exportaciones de petróleo.
“Cuanto más aumenten las restricciones, más complicadas serán nuestras soluciones”, ha recalcado el ministro, añadiendo que los expertos y el personal que trabaja en la industria petrolera iraní tienen las capacidades para lidiar con los problemas causados por las sanciones estadounidenses a la producción y las exportaciones de petróleo del país.
Pakneyad ha puesto de manifiesto que Estados Unidos experimentó una vez la inutilidad de su política de máxima presión sobre Irán durante el primer mandato de Trump en el cargo en 2016-2020.
“Quieren probarlo una vez más y volverán a fracasar”, ha remarcado el ministro de Petróleo de Irán.
Los comentarios se produjeron varios días después de que Trump anunciara que utilizaría el régimen unilateral de sanciones de Washington para interrumpir los flujos de petróleo de Irán a los mercados de Asia y otros lugares.
Trump promulgó una primera ronda de sanciones a las exportaciones de petróleo de Irán en 2018, lo que provocó que las exportaciones de petróleo del país cayeran durante un breve período a fines de 2019 y principios de 2020.
Sin embargo, las exportaciones de petróleo iraní han regresado gradualmente a los niveles anteriores a las sanciones en los últimos años y las estimaciones sugieren que el país está enviando más de 1,8 millones de barriles por día de petróleo, principalmente a clientes en China.
Esto ocurre cuando las exportaciones de petróleo de Irán habían llegado a un mínimo de 0,3 millones de barriles diarios en 2019, cuando Trump eliminó las exenciones de sanciones otorgadas a los principales clientes petroleros iraníes.
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