El movimiento Hezbolá de Líbano ha infligido daños considerables a asentamientos, bases militares e infraestructura en la parte norte de los territorios ocupados.
De acuerdo con información sobre el impuesto a la propiedad obtenida por medios hebreos, “surge una imagen parcial inquietante que indica la destrucción y los daños a aproximadamente 9000 edificios y más de 7000 vehículos que fueron dañados principalmente por el fuego de Hezbolá [El Movimiento de Resistencia Islámica del Líbano]”.
“En los asentamientos situados en la línea de conflicto prácticamente no hay ningún edificio que no requiera renovación, o demolición y reconstrucción”, ha informado este martes el diario israelí Yedioth Ahronoth.
Los asentamientos y ciudades del norte de Kiryat Shmona, Al-Manara, Shtula, Zarit, Nahariya y Shlomi han sufrido el mayor nivel de daños. El informe señala que la verdadera magnitud de la destrucción ha quedado “envuelta en una densa niebla”.
En Kiryat Shmona, las pérdidas son “inimaginables”. El alcalde de esta ciudad, Avichai Stern ha destacado que todas las viviendas de los colonos necesitan reformas, lo que llevará meses.
Stern ha remarcado que no hay ningún plan para recibir a los colonos en el norte. “Cuando vean a dónde han regresado y a qué realidad han regresado, la segunda ola de salida será más amplia”, ha recalcado.
El jefe del consejo de asentamiento de Metulla, David Azoulay reiteró que el 70% de las viviendas allí han sido destruidas.
El presidente del Foro para los Asentamientos en las Líneas de Conflicto, Moshe Davidovitz, expresó que “Israel no tiene idea de cuál es la magnitud del daño ni de qué se debe hacer y tratar al día siguiente de la guerra”.
“Hay muchos heridos en el norte que aún no han sido reportados, porque los inquilinos están siendo evacuados o porque los heridos están en zonas a las que no se puede ingresar, según las instrucciones del ejército”, agregó.
El movimiento ha estado llevando a cabo cientos de operaciones de represalia exitosas contra los territorios ocupados desde el 7 de octubre de 2023, cuando el régimen inició una guerra genocida en la Franja de Gaza e intensificó sus ataques mortales contra El Líbano. Ha prometido mantener sus ataques mientras Israel continúe la guerra en Gaza y la agresión contra el Líbano.
La guerra se ha cobrado la vida de al menos 44 294 palestinos, en su mayoría mujeres y niños, mientras que la escalada en El Líbano ha dejado al menos a 3768 víctimas fatales.
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