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Fue acusado de hacer declaraciones falsas sobre su papel en el nombramiento de la junta supervisora del ‘holding’ estatal ÖBAG, que administra las inversiones del Estado austriaco en diversas empresas.
Sebastian Kurz, quien desempeñó el cargo de canciller de Austria entre 2017 y 2019 y entre 2020 y 2021, fue condenado este viernes a ocho meses de libertad condicional por falso testimonio, recogen medios locales.
Kurz fue acusado de hacer declaraciones falsas en junio de 2020 ante un comité de investigación del Parlamento austriaco sobre su papel en el nombramiento de la junta supervisora del ‘holding’ estatal ÖBAG, que administra las inversiones del Estado en diversas empresas, y el nombramiento de su confidente Thomas Schmid para su dirección.
Kurz aseveró que solo fue informado sobre los nombramientos, pero no participó en la toma de decisiones. De acuerdo con la Fiscalía, Kurz desempeñó un papel importante en la toma de decisiones sobre los empleados de ÖBAG, pero trató de minimizar su influencia en sus testimonios.
Kurz, “sorprendido” por el veredicto
AP señaló que el juez del caso, Michael Radasztics, declaró culpable a Kurz de testificar falsamente sobre el nombramiento de la junta de supervisión de la compañía, pero no sobre el de Schmid. El exjefe de gabinete de Kurz, Bernhard Bonelli, también fue condenado por prestar testimonios falsos sobre su participación en el nombramiento de la junta supervisora de ÖBAG y fue sentenciado a seis meses de libertad condicional.
Comentando el veredicto, Kurz lo tachó de injusto y admitió que estaba “sorprendido”. Al mismo tiempo, destacó que su “vida seguirá mañana igual que ayer”. La defensa del excanciller apeló la decisión del tribunal.
Cabe recordar que Kurz anunció su dimisión en 2021, en medio de una investigación en su contra por presuntos casos de corrupción. Posteriormente, fue despojado de su inmunidad parlamentaria.
