Los sindicatos de agricultores convocantes de las protestas en Francia anunciaron este jueves la suspensión de los bloqueos de carreteras, luego de las medidas anunciadas por el primer ministro Gabriel Attal.
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La Federación Nacional de Sindicatos de Agricultores (Fnsea, por sus siglas en francés) y Jóvenes Agricultores (JJAA), realizaron el llamado en conferencia de prensa conjunta.
“Invitamos a los agricultores a suspender los bloqueos y a iniciar una nueva forma de movilización”, afirmó el titular de la JJAA, Arnaud Gaillot.
Por su parte, el premier galo presentó un conjunto de disposiciones, entre las que resalta la entrega de un fondo de 150 millones de euros de apoyo al sector agrícola, así como modificaciones favorables en el cálculo de la pensión de los rurales.
De igual forma, Attal anunció las denominadas cláusulas de salvaguarda, incluida una destinada a vetar la importación de frutas y verduras tratadas con pesticidas prohibidas en Europa. “Lo hacemos con precedente de lo que hará Europa, es el símbolo de una nueva política, una cláusula espejo”, resaltó.
Entretanto, cientos de agricultores protestan en la capital de Bélgica, donde se reúnen los líderes del bloque en la sede del Parlamento Europeo y la Comisión Europea.
De acuerdo con medios internacionales, los manifestantes prendieron fuego a las barricadas y lanzaron huevos contra las ventanas del edificio de la Eurocámara, mientras algunos tiraron piedras contra las fuerzas de seguridad, que impedían una mayor aproximación a la sede del Consejo Europeo.
Los agricultores expresan su rechazo, entre otras cuestiones, a la importación de productos de terceros países a bajo precio, los cuales califican de competencia desleal debido a que estos no se encuentran bajo las mismas condiciones europeas, que incluyen el aumento de los costos de energía, los controles medioambientales y el incremento de los precios de fertilizantes.
En este sentido, los trabajadores rurales de países europeos como Alemania, Polonia, Francia y España han mostrado desde finales del año pasado su marcado descontento con las políticas del bloque, que, según el primer ministro belga, Alexander De Croo, tuvo que incluir el tema en el encuentro que se celebra hoy.
