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En horas de la mañana de este 30 de agosto, el Gobierno de Venezuela denunció un “sabotaje eléctrico”.
La Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América-Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA-TCP), condenó “de manera categórica” el ataque perpetrado este viernes contra el sistema eléctrico de Venezuela, que dejó sin electricidad a buena parte del país durante gran parte de la jornada.
“Este acto vandálico y criminal por parte de un sector fascista que no acepta la voluntad de los venezolanos y las venezolanas e insiste en seguir con sus planes golpistas, es un ataque directo al pueblo, que afecta gravemente su bienestar y desarrollo, con enormes consecuencias en su salud física y psicológica, impidiendo el desenvolvimiento de su rutina habitual”, se lee en un comunicado divulgado por la organización en X.
#PRONUNCIAMIENTO | ALBA-TCP condena sabotaje al sistema eléctrico venezolanoEl ALBA-TCP repudia contundentemente la violación directa, descarada y flagrante de los derechos humanos del pueblo venezolano y exige que cese el hostigamiento a esta nación hermana. #30Agostopic.twitter.com/7WratHU77d
— ALBA-TCP (@ALBATCP) August 30, 2024
Del mismo modo, el bloque repudió “contundentemente” lo que calificaron como una “violación directa, descarada y flagrante de los derechos humanos del pueblo venezolano” y exigió el “cese del hostigamiento” contra Venezuela, al tiempo que expresó su apoyo “a todas las acciones del Gobierno venezolano para recuperar la normalidad, determinar los responsables y devolverle la paz” al pueblo, que ya ha superado con éxito otros ataques.
“Sabotaje”
A las 4:50 a.m. (hora local), el sistema eléctrico nacional de Venezuela sufrió un “sabotaje” que derivó en la suspensión del servicio en todas las entidades del país, incluyendo la Gran Caracas, según informó entonces el ministro de Comunicación e Información, Freddy Ñáñez, a través de un mensaje en su canal de Telegram. Ñáñez también que atribuyó la situación a factores de la extrema derecha.
Entretanto, el presidente Nicolás Maduro pidió a la población mantener la calma y aseguró que estaba al frente de las operaciones dirigidas a solventar el incidente. Al igual que Ñáñez, Maduro recargó la responsabilidad de lo sucedido a agentes de la oposición extremista.
A media mañana, el ministro de Interior, Justicia y Paz, Diosdado Cabello, aseguró que en ese momento estaba empezando a “energizarse la red” y a regularizarse el suministro en distintos sectores de la capital; empero, recalcó que “es un proceso que va ocurriendo poco a poco y en medio de la seguridad, para no caer en errores”.
