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La Paz considera que las declaraciones de la diplomática, “sin ningún sustento”, buscan “generar confrontación entre Estados, gobiernos y pueblos latinoamericanos”.
El Gobierno de Bolivia negó que albergue bases de Irán y Hezbolá en su territorio, como afirmó la embajadora de Israel en Costa Rica, Michal Gur-Aryeh.
El Ministerio de Relaciones Exteriores boliviano, mediante un comunicado, tildó de “irresponsables, infundadas e interesadas” las declaraciones de la diplomática.
El lunes, en una conferencia de prensa virtual desde San José, Gur-Aryeh afirmó que Hezbolá y grupos radicales iraníes tendrían bases en varios países de Latinoamérica, y nombró específicamente a Bolivia, Venezuela y Nicaragua.
Desde Bolivia señalan que esas declaraciones, “sin ningún sustento”, buscan “generar confrontación entre Estados, gobiernos y pueblos latinoamericanos, en contrarruta con el objetivo trazado en la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) de consolidar a América Latina y el Caribe como zona de paz”.
Por tanto, la Cancillería boliviana insta a los países “hermanos” de Latinoamérica a no caer en estas “provocaciones” que, a su juicio, “pretenden afectar las relaciones de hermandad entre Estados y pueblos de la región”.
Asimismo, recuerda que “Bolivia es un Estado pacifista que promueve la cultura de la paz, por lo que ha asumido constitucionalmente la prohibición de instalar bases militares extranjeras en su territorio“, se enfatiza en el texto.
Por otro lado, en el mismo mensaje, La Paz ratificó su apoyo a la causa palestina y al clamor de la mayor parte de los Estados miembros de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), “que respaldan el cese de la violencia contra los territorios palestinos, así como el reconocimiento de su calidad de Estado pleno”.
Previamente, Nicaragua también rechazó las declaraciones de Gur-Aryeh. Para Managua, esas palabras “tienen el objetivo de desviar la atención del genocidio que está llevando a cabo Israel en los territorios palestinos ocupados, las flagrantes violaciones del derecho internacional humanitario, así como los sistemáticos crímenes de lesa humanidad y crímenes de guerra que son el resultado de una política de terrorismo de Estado”.
