El candidato de centroderecha finés, Alexander Stubb, quedó líder en la primera vuelta de las elecciones presidenciales del domingo, con el 27,2 por ciento de los votos.
LEA TAMBIÉN:
Finlandeses eligen en las urnas a su nuevo presidente
Stubb representaba en estas elecciones al Partido de Coalición Nacional de Finlandia, del espacio político de la centroderecah, e iba primera en el escrutinio según el recuento oficial.
Por su parte, el liberal Pekka Haavisto, miembro del Partido Verde, quedó en segundo lugar con el 25,8 por ciento de los votos, seguido por Jussi Halla-aho, miembro del Partido Nacionalista Finlandés, con el 19 por ciento de las papeletas.
Results (First Round):
99.9 % counted
Alexander Stubb (EPP) – 27.2 %
Pekka Haavisto (GREENS/EFA) – 25.8 %Jussi Halla-aho (ECR) – 19.0 %
Olli Rehn (RE) – 15.3 % pic.twitter.com/ATRkbCf9gG— Pilot Polls (@PollsPilot58414)
January 28, 2024
Si ningún candidato obtiene más del 50 por ciento de los votos en las elecciones del domingo, como ha sucedido, se organizará una segunda vuelta el 11 de febrero entre los dos candidatos principales.
Al reaccionar a los resultados, Stubb, quien ya ocupó el cargo de primer ministro, dijo que “es mucho más de lo que me atrevía a esperar, estoy muy feliz y agradecido”.
“Cualquiera que sea el candidato al que me enfrente en la segunda vuelta, sé que tendremos un debate constructivo, civilizado y de calidad sobre cuestiones difíciles de política exterior”, explicó ante medios de comunicación locales..
Entretanto, Pekka Haavisto, quien fue ministro de Relaciones Exteriores hasta el año pasado, dijo que “las diferencias se aclararán a medida que avance la campaña”.
El presidente finlandés dirige la política exterior y de seguridad en estrecha colaboración con el Gobierno y representa al país en las reuniones de la OTAN, al mismo tiempo que actúa como comandante en jefe de las fuerzas de defensa.
Los tres principales candidatos apoyan a Ucrania y han pedido medidas duras contra Rusia.
La admisión de Finlandia en la OTAN el año pasado desató amenazas de “contramedidas” por parte de Rusia, con la que el país cerró su frontera a las personas que cruzaban en diciembre en respuesta a la afluencia de inmigrantes que intentaban cruzarla.
