China expresó ante el CSNU su preocupación por la escalada de violencia de Israel en Cisjordania y reiteró su rechazo a las acciones que alimentan las tensiones.
El representante permanente adjunto de China ante las Naciones Unidas, Geng Shuang, denunció que “en la Cisjordania ocupada, Israel sigue violando el derecho internacional y las resoluciones del Consejo de Seguridad [de las Naciones Unidas, CSNU]”.
Señaló asimismo que “los asentamientos [de Israel] siguen creciendo y se intensifican los registros, arrestos y redadas contra los palestinos”.
Mencionando las recientes incursiones masivas del ejército israelí contra las ciudades Tulkarem, Yenín y Tubas, entre otros lugares de Cisjordania, Shuang aseveró que China condena enérgicamente estas operaciones del régimen sionista que dejaron decenas de muertos y heridos.
Hizo referencia a declaraciones de autoridades israelíes, según las cuales, el régimen pretende aplicar en Cisjordania ocupada el mismo enfoque que en las operaciones en Gaza. “Estamos conmocionados y seriamente preocupados por esos comentarios extremos que corren el riesgo de ser condenados a nivel mundial”, remarcó.
“Gaza se ha convertido ahora en un infierno en la tierra. Nunca debemos permitir que la misma catástrofe humanitaria de Gaza ocurra en Cisjordania, lo que convertiría a Cisjordania en otro infierno en la Tierra”, concluyó el representante de China ante el CSNU.
El régimen israelí expande sus ataques en el territorio palestino. Mientras transcurren casi 11 meses del incesante bombardeo de la Franja de Gaza con más de 40 600 palestinos asesinados; desde el miércoles, diferentes ciudades de Cisjordania, son el blanco de la incursión y ataques con bombas de los militares israelíes, cobrando la vida de decenas de palestinos, atacando las ciudades de Yenín, Nablus, Tubas y Tulkarem, además de dos campos de refugiados.
Los últimos actos de violencia de los sionistas han provocado denuncias y críticas en todo el mundo. La Organización de las Naciones Unidas (ONU) reclama que se depuraran responsabilidades ante las “alarmantes” violaciones de los Derechos Humanos.
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