China y Rusia denuncian las agresiones de Israel contra Siria y avisan que la ocupación israelí del territorio sirio viola el derecho internacional.
Representantes de diversos países, entre ellos Rusia y China, y algunos responsables de la Organización de Naciones Unidas (ONU), han denunciado este miércoles las violaciones a la soberanía siria, los daños a la infraestructura y el impacto sobre la población civil como consecuencias de las acciones ilegales de Israel en Siria durante una sesión extraordinaria del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas (CSNU).
El representante permanente de Rusia ante la ONU, Vasili Nebenzia, ha condenado las incursiones israelíes en el país árabe desde la caída del gobierno de Bashar al-Asad hace un mes, y señalado que dichas acciones “representan una amenaza directa a la integridad territorial de Siria”.
El embajador ruso ha agregado que Israel se ha apoderado de más de 500 km² del territorio sirio y “sus acciones constituyen una violación flagrante del derecho internacional”.
Nebenzia también ha denunciado los efectos devastadores de las agresiones israelíes en la infraestructura vital siria. “Más de 400 000 personas quedaron sin acceso a agua y electricidad debido a la interrupción de la planta hidroeléctrica de Tishrin en el sur de Idlib y el norte de Hama”, critica.
El representante de China, por su parte, ha condenado los planes expansiones del régimen en los Altos del Golán sirios, diciendo que la ocupación israelí carece de validez y debe respetarse la soberanía de Siria.
Por su parte, el enviado especial de la ONU para Siria, Geir Pedersen, ha expresado su preocupación por la continua presencia militar israelí en el sur de Siria, más allá de la zona de separación, así como por las restricciones impuestas por el régimen en cuanto a la libertad de circulación en dicha zona.
Asimismo, Tom Fletcher, jefe de Asuntos Humanitarios de la ONU, ha censurado los ataques aéreos israelíes en el territorio sirio, que han causado víctimas civiles. “En el sur, las incursiones israelíes han forzado a la población civil, incluidas niñas y personas heridas, a evacuar zonas clave”, criticó.
El régimen israelí aprovechó la caída de Al-Asad, a principios de diciembre, y el caos provocado ahí tras la llegada al poder de los grupos armados opositores, para apoderarse de una franja de terreno en el sur de Siria a lo largo de la frontera con los altos del Golán y ocupar aproximadamente 600 kilómetros cuadrados del territorio del país levantino.
El ejército israelí ha realizado cientos de ataques contra los arsenales de armas estratégicas e instalaciones militares de Siria y ha destruido la mayor parte de la capacidad defensiva del país árabe. Las agresiones israelíes han continuado en medio del caos en Siria y el silencio de nuevos gobernantes y la comunidad internacional.
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