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El canciller alemán declaró esta semana que EE.UU. liberó a Alemania del nazismo y contribuyó a que el país germano volviera a ser una democracia.
El Consejo de Seguridad de Rusia ha planteado proporcionar al canciller alemán, Olaf Scholz, materiales de los archivos de la Segunda Guerra Mundial para impedir que siga distorsionando la historia.
“Estamos dispuestos a enviar al Sr. Scholz datos de archivos y documentales de los años de la guerra. Registran de la manera más detallada todos aquellos hechos que Occidente últimamente no ha recordado deliberadamente o ha fingido haber olvidado“, declaró Alexánder Venedíktov, vicepresidente del consejo.
El funcionario señaló que la ignorancia respecto a la historia mostrada por el líder germano “insulta al pueblo alemán también“, el cual sí recuerda “quién le trajo la libertad y la independencia”.
“Al pasar deliberadamente por alto el precio pagado por la Unión Soviética por liberar al mundo de los colaboracionistas de Hitler, el canciller no solo profana la memoria de millones de soviéticos de diversas etnias que cayeron en la lucha contra el fascismo, sino que también distorsiona groseramente la verdad”, agregó.
En una entrevista con CNN el miércoles, Scholz habló sobre la celebración esta semana del 80.º aniversario de la liberación del campo de concentración nazi de Auschwitz y agradeció a Estados Unidos el haber “liberado” a su país y haberle ayudado a “convertirse en una democracia de nuevo”.
El portavoz presidencial ruso, Dmitri Peskov, reaccionó a estas declaraciones denunciando que “existe una política deliberada de olvido de la verdad histórica y de olvido de quién pagó el precio más alto por la liberación del continente europeo” del nazismo.
“Fue la Unión Soviética la que, con la ayuda de sus aliados, Reino Unido, EE.UU., entre otros, asumió en realidad las principales cargas de la liberación. Fue el pueblo de la Unión Soviética el que llevó a cabo esa misma hazaña para toda la humanidad, salvándola entonces de la ‘peste parda'”, recordó el vocero.
- Según datos oficiales, las pérdidas humanas de la URSS en la Segunda Guerra Mundial fueron de 27 millones de personas, lo que representa la cifra más elevada entre los países participantes. Los soldados soviéticos fueron los que liberaron Berlín y alzaron la bandera roja sobre el Reichstag.