La Comisión Electoral General (KPU) de Indonesia concluyó este miércoles el conteo nacional de votos de los comicios del 14 de febrero pasado y declaró oficialmente como presidente del país surasiático al exgeneral y ministro de Defensa, Prabowo Subianto.
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De acuerdo con los datos emitidos por el ente, Subianto obtuvo el 58 por ciento de los sufragios (96.21 millones). Su compañero de fórmula y vicepresidente electo es Gibran Rakabuming Raka, hijo del presidente saliente, Joko Widodo, quien ocupaba la alcaldía de Surkarta, ciudad de la provincia de Java Central.
Tras la dupla se ubicaron el exgobernador de Yakarta, Anies Baswedan, y su compañero de fórmula, Muhaimin Iskandar, con 24 por ciento (40.97 millones de votos), y a continuación el exgobernador de Java Central, Ganjar Pranobo, junto a Mohammad Mahfud Mahmodin, con el 16 por ciento de los sufragios (27.04 millones).
La KPU recordó que los candidatos perdedores tienen derecho a impugnar los resultados ante el Tribunal Constitucional dentro de los tres días siguientes al anuncio oficial de aquellos.
Según reportes de prensa, en fecha reciente Anies y Ganjar manifestaron su intención de impugnar el resultado electoral. A juicio de ambos, Subianto recibió apoyo extraoficial, aunque de modo implícito, del presidente saliente Widodo. En paralelo, seguidores de Anies y Ganjar criticaron la alianza entre el exgeneral y Gibran Rakabuming Raka.
Las leyes del país surasiático permiten al presidente posicionarse sobre candidatos, aunque le prohíben utilizar fondos estatales para apoyarlos.
Para los comicios de febrero se empadronaron 205 millones de votantes (de una población total de 278 millones), de ahí el extenso recuento hecho por la KPU.
Subianto fue un candidato polémico debido a su pasado como militar y el hecho de que activistas de derechos humanos lo vinculen con violaciones en dicha materia, como abusos contra civiles en Timor Oriental y Papúa y secuestros de activistas. Fue expulsado de las filas, por desobediencia, en 1998.
Durante su campaña prometió proseguir con reformas iniciadas por Widodo, desarrollar infraestructuras, fomentar empleos y una mejor alimentación, y cambiar la capital de Yakarta (cuyos cimientos se hunden) a lo que sería la moderna ciudad de Nusantara.