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El hombre aseguró que emprendería acciones legales por algo que considera un uso excesivo de la fuerza durante la redada de su hogar.
El dueño de ‘Peanut’, la popular ardilla de las redes sociales que fue sacrificada esta semana por las autoridades del estado de Nueva York (EE.UU.), expresó su condena frente a la muerte del que consideraba su “mejor amigo”.
Mark Longo, acompañado por su esposa, habló entre lágrimas al respecto en una transmisión en vivo en TikTok. “Estoy enfadado, triste y disgustado. Luchamos y trabajamos todos los días para pagar nuestros impuestos estatales y se dan la vuelta y le hacen esto a una familia”, indicó.
Mark Longo has just revealed that the New York Department of Environmental Conservation euthanized his cherished pet squirrel, Peanut. This innocent creature was taken from him, where he had lovingly raised it since it was a baby, after its mother got hit by a car. Mark used… pic.twitter.com/C4K4mGq0S5
— Ian Miles Cheong (@stillgray) November 1, 2024
El Departamento de Conservación Ambiental (DEC, por sus siglas en inglés) de Nueva York hizo una redada este miércoles a la casa de Longo y decomisó a ‘Peanut’ y a un mapache llamado ‘Fred’, luego de recibir múltiples denuncias anónimas de que el roedor podría ser un posible foco de contagio de rabia.
Más adelante, las autoridades informaron que ambos animales habían sido sacrificados para detectar la rabia. También afirmaron que uno de los funcionarios del departamento fue mordido por la ardilla mientras se realizaba la investigación.
El hombre aseguró que emprendería acciones legales por algo que considera un uso excesivo de la fuerza durante la redada. “Me han arrebatado a uno de los animales más increíbles por su egoísmo. Al grupo de gente que llamó a DEC, hay un lugar especial en el infierno para ustedes“, añadió.
Mark Longo había adoptado a ‘Peanut’ hace siete años cuando vio cómo la madre de la ardilla fue atropellada por un auto. Cuidó del roedor durante ocho meses antes de intentar liberarlo de nuevo en la naturaleza, pero ‘Peanut’ regresó a su porche un día y medio después con un hueso roto que le sobresalía de la cola, momento en que Longo decidió que el animal no podría sobrevivir solo en la naturaleza.
