Francia, Alemania y el Reino Unido expresaron su preocupación por los renovados ataques israelíes contra Gaza y pidieron un retorno inmediato a la tregua.
Francia, Alemania y el Reino Unido pidieron el viernes un retorno inmediato al alto el fuego en Gaza, instando a Israel a respetar plenamente el derecho internacional y permitir el acceso inmediato a la ayuda humanitaria.
En una declaración conjunta, los tres países destacaron que “la reanudación de los ataques israelíes en Gaza supone un dramático retroceso para el pueblo de Gaza, los detenidos, sus familias y toda la región”.
“Estamos consternados por las bajas civiles y pedimos urgentemente el restablecimiento inmediato del alto el fuego”, añadieron en la declaración.
Además, instaron a reanudar las negociaciones para garantizar la plena implementación y la permanencia del alto el fuego.
Por otro lado, la declaración enfatizó que la población civil tiene derecho a la paz y la seguridad, subrayando que el conflicto no puede resolverse mediante medios militares.
La declaración advirtió que el regreso a los combates solo provocará la muerte de más civiles palestinos y cautivos israelíes.
“Instamos a Israel a restablecer el acceso humanitario, incluidos el agua y la electricidad, y a garantizar el acceso a la atención médica y las evacuaciones médicas temporales de conformidad con el derecho internacional humanitario”, agregó el comunicado.
Los países europeos expresaron estar “profundamente conmocionados” por el ataque israelí a la casa de huéspedes de la Oficina de las Naciones Unidas de Servicios para Proyectos (UNOPS) en el centro de Gaza, donde un empleado murió y varios más resultaron heridos, señalando que había ciudadanos europeos entre las víctimas.
Más de 700 palestinos han muerto y más de 1000 resultaron heridos en una sorpresiva campaña aérea de Israel sobre Gaza desde el martes, rompiendo un acuerdo de alto el fuego y un intercambio de prisioneros que había entrado en vigor en enero.
Esta escalada constituye la mayor violación del acuerdo de alto el fuego, que Israel no ha implementado plenamente, especialmente la segunda fase que debía comenzar tras la finalización de la primera fase a principios de marzo.
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