El primer ministro de Hungría dice que la Unión Europea (UE) está sin un pavo y ya no puede proporcionar ayuda financiera y militar a Ucrania.
“La UE no tiene ni un céntimo; ha gastado todo su dinero. Cuando habla de querer seguir armando a Ucrania, mantener el Ejército ucraniano, financiar el funcionamiento del Estado ucraniano en general o reconstruir Ucrania, lo hace de tal manera que, al sacar la bolsa, no encontrará ni una moneda”, dijo el jueves Viktor Orbán durante una entrevista con un medio local.
Sus comentarios se produjeron durante la misma jornada en la que los miembros del bloque comunitario, excepto Hungría, firmaran una declaración conjunta en apoyo a Ucrania en Bruselas, capital belga.
Los jefes de Estado y de Gobierno del bloque reafirmaron su compromiso para seguir suministrando armas y munición al Ejército ucraniano, postulado del que se desmarcó Orbán.
En la entrevista, el premier húngaro calificó los planes europeos para la defensa de Kiev como “promesas vacías”, argumentando que no cuentan con “respaldo financiero”.
Desde Bruselas, Hungría volvió a apoyar las iniciativas del presidente estadounidense, Donald Trump, para alcanzar un acuerdo de paz entre Rusia y Ucrania, defender los intereses nacionales y no aceptar cargas financieras adicionales impuestas por Bruselas.
El inquilino de la Casa Blanca ha culpado a Ucrania del conflicto en curso desde febrero de 2022, mientras acusa a Kiev de prolongar innecesariamente la mayor guerra terrestre en Europa desde la Segunda Guerra Mundial.
En la reunión del jueves, los líderes de la UE, excepto Orbán, rechazaron las exigencias del presidente ruso, Vladímir Putin, para que se detenga por completo la ayuda militar a Ucrania como parte de las negociaciones en curso hacia un alto el fuego. El líder ruso hizo la exigencia el martes pasado, cuando aceptó detener los ataques contra el país eslavo.
Desde el comienzo de la guerra, los países occidentales, encabezados por Estados Unidos, han enviado decenas de miles de millones de dólares en armas a Ucrania.
Rusia acusa a Occidente de echar gasolina al conflicto de Ucrania, al enviar armas letales al país eslavo, y advierte que considerará como objetivo legítimo los cargamentos militares occidentales en el territorio ucraniano.
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