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Se trata de unos aparatos que estimulan el nervio encargado de controlar los músculos de la lengua, con la finalidad abrir las vías respiratorias de la persona mientras duerme.
Un nuevo tratamiento basado en un chip electrónico permitirá mejorar la calidad de vida de los casi 8 millones de británicos que sufren de la afección respiratoria más común relacionada con el sueño, informa este viernes Sky News.
La apnea obstructiva del sueño es un grave trastorno que provoca que la respiración de una persona se interrumpa repetitivamente mientras duerme, perturbando de esta manera su descanso. Esta enfermedad es ocasionada cuando los músculos de la garganta se relajan y bloquean el flujo de aire hacia los pulmones.
Un signo de la apena obstructiva del sueño es el ronquido. De acuerdo con los expertos, la interrupción de la respiración causa que los niveles de oxígeno disminuyan, por lo que aumentan las posibilidades de padecer hipertensión, accidentes cerebrovasculares y diabetes. Se ha reportado que algunas personas han muerto a consecuencia de esta afección.
Actualmente, el tratamiento más común para la apnea obstructiva es una máquina que utiliza presión positiva para mantener las vías respiratorias de las personas al momento de dormir. Sin embargo, este método es tan incómodo que un tercio de los pacientes terminan por abandonar su uso.
Un tratamiento alternativo
Ahora, cirujanos británicos han implantado dos tipos de estimuladores nerviosos ligeramente diferentes, denominados Genio Nyxoah e Inspire, a los primeros pacientes con apnea obstructiva del sueño moderada o grave. Ambos dispositivos se encargan de estimular el nervio hipogloso, que controla los músculos de la lengua, con la finalidad de abrir las vías respiratorias superiores.
En el caso de Genio Nyxoah, el procedimiento consiste en hacer primero una pequeña incisión debajo del mentón, para luego colocar el estimulador en el nervio hipogloso. Las personas regresan alrededor de seis a ocho semanas después de la operación para que les enciendan el implante.
Este estimulador es controlado por un chip externo que se adhiere al mentón mediante un parche adhesivo antes de que los pacientes se vayan a dormir. Asimismo, estos pueden ajustar el nivel de estimulación a su gusto y monitorear su sueño a través de una aplicación para teléfonos inteligentes.
No obstante, la colocación de estos estimuladores está limitado a un reducido número de pacientes que no pueden utilizar la máquina de presión positiva. Por otro lado, las personas elegibles para estos dispositivos deben tener un índice de masa corporal inferior a 35, es decir, por debajo del rango de obesidad.
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