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La togada aseguró que tiene en su poder una memoria portátil con soportes en los que se le indicaba cómo debía pronunciarse sobre el caso.
La jueza ecuatoriana Nubia Vera denunció este lunes que había “sido coaccionada, amenazada y amedrentada“, tras haber dejado sin efecto la medida que suspendía de su cargo por 150 días a la vicepresidenta Verónica Abad, lo que le permitió a la alta funcionaria ocupar nuevamente su posición.
En declaraciones ofrecidas a la prensa, la togada aseguró que la semana previa recibió una visita en su despacho del presidente del Consejo de la Judicatura, Mario Godoy; del director provincial, Henry Gaibort, y del asesor de Godoy, Jorge Carrillo, que fue camuflada con un recorrido institucional reportado en la página oficial del establecimiento judicial.
En aquel momento, sostuvo, fue amenazada con ser destituida de su cargo si su dictamen era favorable a Abad, como finalmente sucedió. “Es decir, que esta acción de protección yo no tenía que considerar la Constitución, las leyes, los tratados internacionales, sino que debía favorecer un capricho de negar esta acción de protección”, refirió.
A esto sumó que había recibido de manos de Godoy, Gaibort y Carrillo una memoria portátil, que se encuentra “a buen recaudo”, con material donde se le indicaba cómo “tenía que fallar en esta acción de protección”.
Aseguró asimismo que se le están adelantando “sumarios administrativos” con quejas varias, en interés de sancionarla, sin “derecho a la defensa”, para declarar en la corte provincial que cometió “un error inexcusable” al acoger la acción de protección interpuesta por Abad.
“Estos hechos los denuncio porque mi carrera está en juego, porque me he dedicado tanto a trabajar y al servicio a la Justicia, y no es justo que vengan a amedrentar a un juez, a interferir”, concluyó.
Por su parte, Godoy rechazó “categóricamente” lo declarado por Vera, al considerar que se trata de una actuación que busca politizar los procesos de administración de justicia, al tiempo que aseveró que su gestión no ha amenazado con sanciones a persona alguna ni ha tomado partido por ninguna parcialidad política.
