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El presidente de Venezuela denunció los intentos de “reactualizar” el llamado Grupo de Lima e instó a investigar los fondos que se gastan con tal objetivo.
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, acusó este miércoles al Gobierno de EE.UU. de financiar a “Sodoma y Gomorra”, refiriéndose así al llamado Grupo de Lima, que apoya a la oposición venezolana.
Durante un acto con la directiva de la Asamblea Nacional, el mandatario denunció los intentos de “reactualizar el grupo Sodoma y Gomorra de gobiernos arrastrados y expresidentes pedófilos, corruptos, drogadictos y narcotraficantes”. Maduro preguntó sobre si su país necesita a un nuevo Guaidó, “más intervencionismo” y un nuevo Grupo de Lima “decadente” que “se parece al grupo de Sodoma y Gomorra”. “Una verdadera Sodoma y Gomorra se ha puesto alrededor del nuevo Guaidó”, dijo.
“Bastante billete, […] cada declaración, cada [publicación en] Twitter, cada mensajito, cada acto, cada pasaje de avión, pague, pague, pague y el Gobierno saliente de EE.UU. y el Departamento de Estado de EE.UU., la chequera abierta“, comentó Maduro.
“Ojalá alguien en Estados Unidos investigara cómo se están utilizando los recursos del Gobierno saliente del presidente Joe Biden para financiar a Sodoma y Gomorra y al nuevo Guaidó. Basta ya de intervencionismo, basta ya de extremismo, basta ya de grupos de Lima”, dijo.
Caracas condena la postura de Washington
Anteriormente, la Casa Blanca informó que Biden recibió “al presidente electo de Venezuela, Edmundo González Urrutia” en interés de “hablar sobre los esfuerzos compartidos para restaurar la democracia en Venezuela”. Se afirmó además que el mandatario saliente respalda la versión de González Urrutia, según la cual las elecciones presidenciales fueron “profundamente defectuosas”, pese a lo cual el abanderado opositor “recibió la mayoría de los votos por un margen insuperable”. Mientras tanto, el político derechista no ha ofrecido pruebas que respalden el triunfo que reclama.
Por su parte, el Gobierno de Venezuela condenó el comunicado de la Casa Blanca. Para Caracas, el pronunciamiento de Washington “representa una flagrante violación del derecho internacional” y es “un intento burdo para perpetuar la injerencia imperialista en América Latina“, de acuerdo con un comunicado difundido en Telegram por el canciller, Yván Gil.
Según el criterio de las autoridades venezolanas, “la Administración Biden […] recurre nuevamente a las gastadas estrategias de intervención, tratando de inflar artificialmente figuras políticas insignificantes en Venezuela, mientras ignora la clara voluntad soberana” del pueblo de Venezuela.
