El Gobierno de Nicaragua ha condenado el “genocidio de largo plazo” en Gaza y se ha unido al “grito global contra las matanzas y la brutalidad de Israel”.
Con ocasión del Día Mundial de Solidaridad con Palestina, el Gobierno nicaragüense, en un comunicado firmado por el presidente Daniel Ortega y la vicepresidenta Rosario Murillo, rechazó el viernes una vez más todas las formas de un genocidio prolongado que el régimen de Israel sigue ejerciendo a lo largo de años a los palestinos, calificándolos como el “pueblo de Dios”.
“Condenamos, rechazamos y nos unimos al clamor global para detener el exterminio, la masacre, la brutalidad” del régimen de Israel, se lee en el documento.
Tras calificar las acciones israelíes de las prácticas fascistas, el país centroamericano denunció que el régimen se coordina con sus socios en el mundo para continuar arrebatando los derechos del pueblo palestino.
Mensaje del Presidente-Comandante Daniel, y Compañera Rosario , en el Día Mundial de Solidaridad con el Querido, Valiente y Noble Pueblo Palestino. pic.twitter.com/7ETeow41E0
— El 19 Digital (@el19digital) November 29, 2024
Asimismo, destacó los “vínculos históricos de la lucha” de Nicaragua y recordó al militante Patricio Argüello Ryan, quien defendió la causa de Palestina hasta su último aliento.
La Asamblea General de la Agencia de Naciones Unidas (AGNU) declaró el 29 de noviembre como el Día Internacional de Solidaridad con el Pueblo Palestino para concientizar a los gobiernos de todo el orbe sobre la crisis de Palestina, un pueblo que ha sufrido todo tipo de violaciones a sus derechos humanos, perpetradas por el régimen israelí.
El secretario general de las Naciones Unidas aseveró el viernes que nada justifica el castigo colectivo de los palestinos y exigió el fin de la ocupación ilegal de las tierras palestinas.
La guerra en Gaza está pasando su día 421 mientras los movimientos regionales e internacionales se esfuerzan para alcanzae un acuerdo que pondrá fin a la guerra genocida de Israel contra Gaza; una guerra que ha dejado 140 000 mártires y heridos, unos 10 000 palestinos desaparecidos y ha causado mucha destrucción, y decenas de niños y ancianos sufren hambre.
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