Nicaragua anuncia su salida oficial del Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas (CDHNU), informó el Ministerio de Relaciones Exteriores de ese país.
La Cancillería nicaragüense comunicó este jueves la salida del organismo intergubernamental del sistema de Naciones Unidas, tras el rechazo del Gobierno de Daniel Ortega al Informe del Grupo de Expertos en Derechos Humanos sobre Nicaragua, realizado por la CDHNU.
“Nicaragua transmite su decisión soberana e irrevocable de retirarse del Consejo de Derechos Humanos y de toda actividad relacionada con este Consejo y todos sus mecanismos satélites”, manifestó la copresidenta de Nicaragua, Rosario Murillo.
Murillo, citada por medios locales, destacó que estos instrumentos se han convertido en plataformas para atacar a Nicaragua, obstaculizando el desarrollo económico y social en áreas vitales como la educación, salud, vivienda, infraestructura, seguridad alimentaria, energía y saneamiento.
Reiteró igualmente que Nicaragua no se someterá a sistemas que utilicen los derechos humanos como pretexto para intervenciones ilegítimas, y reafirmó el compromiso del gobierno sandinista de promover políticas que beneficien al pueblo y aseguren el bienestar de todas las familias nicaragüenses.
Murillo mencionó además que el Consejo de Derechos Humanos “viola su propia normativa”, contenida en la Resolución 6251 aprobada el 15 de marzo del 2006, donde se establecieron los principios de objetividad, imparcialidad y no selectividad en el examen de las cuestiones de derechos humanos, así como la obligación de eliminar la aplicación de un doble rasero y de eliminar la politización.
Por su parte, el canciller nicaragüense, Valdrack Jaentschke Whitaker, en alusión al informe del Consejo de Derechos Humanos, indicó que “es una evidencia del doble rasero y la politización de cada uno de estos mecanismos, que cotidianamente instrumentalizan los Derechos Humanos, usándolos como pretexto para injerir en los asuntos internos de los Estados e irrespetar la soberanía”.
En años anteriores, el Gobierno de Daniel Ortega ha denunciado la politización de informes de la ONU contra su país. También se ha salido de otra entidades como la Organización de Estados Americanos (OEA) por considerarlas injerencistas y politizadas.
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