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Actualmente se encuentra privado de su libertad en la cárcel La Picota de Bogotá.
Un juez de la Sala de Justicia y Paz del Tribunal Superior del Distrito Judicial de Barranquilla, en el departamento del Atlántico de Colombia, negó la solicitud de libertad presentada por el excomandante paramilitar Salvatore Mancuso Gómez.
El magistrado Carlos Andrés Pérez se pronunció en contra de la libertad a Mancuso frente a 33 medidas de aseguramiento en su contra que seguían pendientes en Barranquilla.
Su decisión se da en respuesta a la solicitud hecha por parte del Gobierno, ante el nombramiento de Mancuso, excomandante de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), como “gestor de paz” por parte del presidente, Gustavo Petro.
En su resolución, el juez indicó que en el decreto por el cual se hizo tal designación existen vacíos sobre sus funciones. “Por poco se asemejan a las funciones que desempeña el alto comisionado para la paz“, dijo Pérez.
“En mérito de lo expuesto, el Tribunal Superior del Distrito de Barranquilla, Sala Penal de Justicia y Paz, resuelve inaplicar para el caso presente y bajo concepción de inconstitucionalidad la resolución presidencial 244 del 14 de agosto de 2023 por la cual se designa como gestor de paz a un exmiembro de las autodenominadas AUC y se dictan las disposiciones. Segundo, denegar en consecuencia la libertad extraordinaria que solicitó el presidente para el postulado Salvatore Mancuso”, indicó el magistrado, citado por el medio Cambio.
El juez explicó que la resolución por la cual se hizo el nombramiento de Mancuso como gestor de paz tiene “serios vicios que la hacen incompatible con la Constitución”, pues pretende “una excarcelación abierta e ilimitada para un postulado de la ley de beneficios de justicia y paz a quien en solo este tribunal se le han atribuido responsabilidades por 34.002 crímenes de lesa humanidad y de guerra“.
Extradición y otra decisión
Mancuso llegó a Colombia el pasado 27 de febrero, tras ser extraditado desde EE.UU., país donde cumplió una condena por narcotráfico y se mantenía retenido en un centro de migrantes irregulares.
Desde su regreso a Colombia, se encuentra privado de su libertad en la cárcel La Picota, de Bogotá.
Varios días después, el lunes 4 de marzo, la jueza de ejecución de penas de Justicia y Paz del Tribunal Superior de Bogotá, Luz Marina Zamora, le otorgó la libertad condicionada a Mancuso por tres de 50 procesos que avanzan en su contra.
“Se concederá al postulado condenado la libertad con un periodo de prueba de cuatro años“, decidió entonces la jueza, que indicó que Mancuso debería presentarse cada tres meses ante la Justicia y Paz en Medellín, ciudad donde tenía previsto residir, y se le prohibió desplazarse, sin previa autorización, a los departamentos donde ejerció influencia como comandante paramilitar.
Sin embargo, en la boleta de excarcelación se precisó que su libertad condicional se haría efectiva “siempre y cuando Mancuso no sea requerido por otra autoridad”, como es el caso del tribunal de Barranquilla.
Mancuso aún tiene otra audiencia pendiente para el próximo viernes 15 de marzo ante un tribunal de Bogotá, en la que se definirá si le levantan 14 medidas de aseguramiento impuestas por su vínculo a delitos cometidos por las AUC, reseñó El Tiempo.
La semana pasada, durante una primera audiencia en la Sala de Justicia y Paz del Tribunal Superior de Barranquilla. Mancuso defendió su designación como gestor de paz.
“No es algo traído de los cabellos que se inventó el señor presidente de la República. Está reconociendo la experiencia y el conocimiento, la ascendencia que tuve sobre estos grupos armados […] El Gobierno Nacional no me ha ha nombrado ni vocero ni miembro representante de un grupo rearmado posterior a la desmovilización de las Autodefensas”, dijo.
