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Si al final de la operación de su división el norte de la Franja de Gaza estuviera “vacío de residentes”, sería la imagen de victoria de Yehuda Vach.
El comandante de la 252.ª División militar de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), que operaba en el corredor de Netzarim, teniente coronel Yehuda Vach, quería expulsar por la fuerza de la Franja de Gaza a unos 250.000 palestinos para que la zona estuviera completamente “vacía de residentes”, según una investigación publicada este martes en Haaretz.
“Imagen de victoria”
A principios de diciembre, Vach convocó al cuartel general de la división para resumir lo acontecido en cuatro meses de combates en el corredor de Netzarim, una carretera pavimentada por Tel Aviv que se extiende desde Israel hasta el mar Mediterráneo, dividiendo el enclave palestino en dos, y dijo que no habían cumplido el objetivo que, según su “imagen de victoria”, suponía terminar la operación con el norte de Gaza “vacío de residentes”.
De acuerdo con los comandantes que hablaron con Haaretz, Vach quería expulsar por la fuerza a unos 250.000 residentes palestinos que se negaban a abandonar sus hogares al norte de la Franja de Gaza. “Solo a través de la pérdida de tierras los palestinos aprenderán las lecciones necesarias de la masacre llevada a cabo por Hamás en la Franja de Gaza el 7 de octubre”, habría dicho Vach en ese momento.
Luego, cuando en una presentación preparada para él vio una diapositiva sobre la ayuda humanitaria, ordenó que la eliminaran, alegando: “No hay inocentes en Gaza”. “Su mayor locura era trasladar a los habitantes de Gaza al sur y tomar territorio, tanto como fuera posible“, recordó un informante.
Comportamiento imprudente
Conforme a dos investigaciones del periódico en torno a las atrocidades cometidas por militares israelíes en el enclave palestino, el hecho de que el comandante de división tuviera un poder “casi ilimitado en el uso del fuego en la zona de combate” ha puesto a los combatientes “ante difíciles dilemas morales“.
En este contexto, según precisaron desde Haaretz, Vach fue descrito a menudo por sus propios colegas como “alguien que actuaba imprudentemente”. Así, operando en el corredor de Netzarim, Vach ordenaba expandirlo incluso en lugares donde no había prioridad operativa y destruyendo casas gazatíes. “No dijeron que el objetivo fuera demoler 60 edificios todos los días. En la práctica, no se acercaba a esos números, tal vez eran seis casas por día“, contó un militar.