China manifestó este lunes su rechazo a las expresiones de la Unión Europea (UE) sobre un incidente ocurrido el fin de semana en el Mar Meridional de China.
En un comunicado de la misión china ante la UE, Pekín exigió a los Veintisiete a ser cuidadosa con las palabras y acciones en las cuestiones del Mar Meridional de China, unas aguas en disputa entre China y otros países de la zona, después de que el portavoz del Servicio Europeo de Acción Exterior (SEAE) hiciera declaraciones irresponsables sobre este asunto.
“La Unión Europea no es parte en la cuestión del Mar Meridional de China y no tiene derecho a señalar con el dedo a nadie en este asunto”, subraya la nota.
Pone de relieve que la repetida “exageración” de la parte europea sobre la cuestión de la libertad de navegación no beneficia en nada a los propios intereses de la UE ni a su credibilidad internacional.
“China está profundamente descontenta con las acusaciones de la parte europea, se opone firmemente a ellas y nunca las aceptará”, remarca el texto.
Insta asimismo a la Unión Europea a ser “objetiva y justa” y a tener cuidado con sus palabras y acciones sobre la cuestión del Mar Meridional de China.
La UE siguió los pasos de Estados Unidos que el domingo expresó su enérgico rechazo a lo que llamó “agresión” de China contra un barco filipino, calificando el incidente como “peligroso” y “escalofriante”.
¿Qué desató el descontento de China?
El domingo, la Unión Europea condenó la reacción de buques de la Guardia Costera china contra una embarcación de la Guardia Costera filipina en las disputadas aguas del Mar Meridional.
El Servicio Europeo de Acción Exterior dijo que ese incidente “es el último de una serie que durante el mes pasado han puesto en peligro la seguridad de la vida marina en contra del derecho a la libre navegación del que gozan las naciones conforme al derecho internacional”.
Según las autoridades filipinas, un buque de la Guardia Costera china colisionó deliberadamente hasta tres veces con la embarcación filipina, que se encontraba realizando operaciones legales dentro de la Zona Económica Exclusiva (ZEE) de Filipinas.
China, en contraste, insiste en que su embarcación actuó en defensa de su soberanía y acusa a Filipinas de transitar ilegalmente en sus aguas.
El incidente se produjo cerca del banco de arena Sabina (conocido por China como Xianbin Jiao), un área disputada que forma parte del archipiélago de las islas Spratly, reclamadas por Pekín y situadas en el Mar de China Meridional.
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