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La presidenta mexicana descartó por el momento la posibilidad de solicitar un préstamo al FMI.
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, aseguró que la economía del país tiene la fortaleza necesaria para enfrentar la eventual recesión mundial que podría provocar la guerra comercial iniciada por el Gobierno de EE.UU.
“Obviamente estamos atentos (…) frente a cualquier situación internacional que se pueda presentar. Lo cierto es que han caído las bolsas y hay quien habla de una posible recesión. También nosotros creemos que podemos salir adelante en cualquiera de las circunstancias”, afirmó la mandataria en conferencia de prensa.
Sin embargo, convocó a esperar al 2 de abril, ya que en esa fecha el presidente de EE.UU., Donald Trump, anunciará cómo quedará finalmente el marco internacional de impuestos que aplicará al resto del mundo.
La presidenta Sheinbaum afirmó que en caso de pedir un préstamo al FMI, “Jamás aceptaremos las condicionantes para que renunciaremos a lo que somos, lo que pediríamos serían líneas de crédito, pero no bajo una premisa que tenga que ver con cambiar” pic.twitter.com/Jy0cve8L8h
— El Heraldo de México (@heraldodemexico) March 12, 2025
“Ahí se podría hacer una expectativa de más largo plazo (pero) la economía de México está muy bien“, afirmó Sheinbaun al ratificar el optimismo que tiene con respecto a la fortaleza con la que este país podría superar cualquier crisis externa.
Condiciones
En ese sentido, reveló que México cuenta con una línea de crédito abierta con el Fondo Monetario Internacional (FMI) que, ante una emergencia, podría llegar a utilizarse.
“No lo vemos en este momento como una alternativa porque va muy bien la recaudación, increíblemente muy bien (…) se está trabajando contra la evasión, no creemos que sea necesario pero, en el último de los casos, si se necesitara, hay esa salida“, dijo.
Con respecto a los préstamos que el FMI y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) otorgaron durante los pasados gobiernos neoliberales, Sheinbaum denostó que estaban condicionados a aplicar un modelo económico basado en las privatizaciones y el recorte al gasto social, algo que ella nunca haría porque contradice por completo su modelo de Gobierno.
“Si llegáramos a necesitar un préstamo del Fondo jamás estaríamos aceptando esas condiciones porque sería renunciar a lo que somos“, advirtió.
