Seúl es escenario de protestas por la orden de arresto del expresidente Yoon Suk Yeol, en medio de una crisis política y el dolor por el reciente accidente aéreo.
Cientos de personas se reunieron Seúl, cerca de la residencia presidencial para pedir el arresto inmediato del presidente destituido, Yoon Suk Yeol. El asediado líder fue destituido por los legisladores por su desafortunado intento de imponer la ley marcial el mes pasado.
Al mismo tiempo, los manifestantes que apoyan al presidente de Corea del Sur tambien se manifestaron. Los investigadores tienen una orden de detención, que han prometido ejecutar antes del 6 de enero.
El caos político causado por la efímera imposición de la ley marcial a principios de diciembre ya había arrojado una nube de incertidumbre sobre el país, mientras que el trágico accidente aéreo de Jeju Air del pasado domingo, que se cobró 179 vidas, convirtiéndolo en el peor desastre de aviación de Corea del Sur en casi tres décadas, ha provocado un gran dolor nacional.
Mientras ha iniciado una investigación sobre las causas del accidente aéreo, la policía de Corea del Sur anunció este jueves, la prohibición de salida del país del presidente de la aerolínea surcoreana Jeju Air, luego del accidente fatal de uno de sus aviones, que dejó 179 pasajeros muertos.
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