Rusia advierte nuevamente a Occidente sobre el suministro de armas a Ucrania, esperando que estos países respeten una línea roja.
Las políticas de Occidente hacia la crisis en Ucrania, están condenadas al fracaso, según lo ratifica el canciller de Rusia, Serguéi Lavrov, en una rueda de prensa con su homólogo senegalés, Yassine Fall, en Moscú. El diplomático ruso consideró que la coalición occidental tiene la seria intención de cumplir las instrucciones de Estados Unidos y tratar de infligir una derrota estratégica a Rusia, tal y como estipulan los documentos doctrinales de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).
Lavrov también aludió a las reiteradas peticiones de Kiev de que a Occidente se le permita utilizar el armamento entregado por este bloque para atacar objetivos en la retaguardia profunda de Rusia. El jefe de la Diplomacia rusa advirtió que Moscú vigila atentamente los pasos que están dando los países de la OTAN en relación al conflicto en Ucrania.
En otra parte de sus declaraciones, el diplomático ruso destacó que Moscú siempre estuvo dispuesto a negociar una solución al conflicto ucraniano, pero, tras la ofensiva de Kiev en la provincia rusa de Kursk, las conversaciones al respecto son irrelevantes.
El pasado 6 de agosto, las tropas ucranianas iniciaron una incursión armada en la región rusa de Kursk y ocuparon varias áreas, lo que provocó el desplazamiento de más de 130 mil civiles y decenas muertos y heridos. Desde el 9 de agosto, la región vive una situación de emergencia de nivel federal.
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