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El republicano Rand Paul se posicionó en contra de enviar otros 60.000 millones de dólares “a las arcas de un régimen notoriamente corrupto”.
El senador estadounidense Rand Paul se ha pronunciado en contra de la aprobación de un proyecto de ley que incluye la asignación de nueva asistencia financiera para Ucrania.
“Este proyecto de ley no solo es un error: es un insulto directo a todos los estadounidenses, especialmente porque nuestras fronteras siguen desprotegidas y el Pantano no hace más que ofrecer reformas falsas”, aseveró el político republicano en sus redes sociales este sábado, refiriéndose al actual Gobierno estadounidense.
“Este proyecto de ley de gastos canaliza 60.000 millones de dólares (además de los 113.000 millones de dólares anteriores) directamente a las arcas de un régimen notoriamente corrupto“, escribió Paul, representante del estado de Kentucky.
“Una de las muchas atroces asignaciones de su dinero ganado con sudor: 300 millones de dólares para ‘ayudar a Ucrania a proteger sus fronteras y promover el Estado de derecho'”, agregó el senador dirigiéndose a la población estadounidense.
Esta misma semana, Paul se había comprometido a retrasar la votación del mencionado proyecto de ley con el fin de impulsar un debate serio sobre la crisis fronteriza de Estados Unidos. “Les obligaré a quedarse aquí para debatir por qué creen que la frontera de Ucrania es más importante que la de EE.UU.“, declaró.
Un paso clave hacia la aprobación
Los comentarios del legislador se produjeron después de que el proyecto de ley de ayuda diera un paso clave hacia su aprobación en el Senado al superar la llamada votación de clausura, lo que significa que ya no puede ser bloqueado por un intento de obstrucción.
Sin embargo, Paul y otros opositores pueden ralentizar el avance de la ley hacia la votación final introduciendo enmiendas y exigiendo que se debatan. El proyecto de ley solo puede ser sometido a votación sin pasar por debates si los 100 senadores están de acuerdo con el procedimiento acelerado.
El paquete de ayuda que los congresistas quieren aprobar incluye 95.000 millones de dólares en gastos de emergencia, incluidos 60.000 millones para Ucrania, 14.000 millones en asistencia de seguridad para Israel y casi 5.000 millones para ayudar a disuadir la supuesta ‘agresión’ china contra Taiwán. Si se aprueba en el Senado, requerirá la aprobación de la Cámara de Representantes, controlada por los republicanos, antes de pasar al presidente para su aprobación final.
