Publicado:
En la Casa Blanca ya manejan una serie de acciones que permitan intensificar las expulsiones de EE.UU.
Donald Trump basó su campaña electoral en el tema migratorio. Su promesa era clara: deportar a millones de extranjeros apenas volviera al poder. Sin embargo, ahora que es nuevamente presidente de EE.UU. los números no están cumpliendo sus expectativas.
La administración de Trump ha deportado a 37.660 personas durante su primer mes en el cargo, según datos del Departamento de Seguridad Nacional citados este viernes por la agencia Reuters, que denota una clara diferencia con su antecesor, el demócrata Joe Biden.
El promedio mensual de expulsiones y deportaciones en el último año completo del Gobierno de Biden fue de 57.000. Ante esta diferencia, un alto funcionario de la actual administración comentó que el número de devoluciones podría aumentar en los próximos meses a medida que la Casa Blanca consigue nuevas vías.
Y para eso fuentes apuntan que las opciones barajadas contemplan los acuerdos alcanzados con Costa Rica, El Salvador, Guatemala y Panamá para la repatriación de inmigrantes.
Además, ahora que EE.UU. ha designado a ocho organizaciones criminales latinoamericanas como “terroristas”, toda persona vinculada podría ser deportada.
A principios de mes algunas fuentes le contaron a NBC News que Trump estaba “enojado” por el número que llevaban en ese momento. “Lo está volviendo loco que no deporten a más gente”, reveló una persona anónima.
