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En las publicaciones eliminadas, el Centro ucraniano para la Lucha contra la Desinformación acusaba a Gabbard de manipulación y desinformación y de trabajar para Moscú.
Tras el anuncio del presidente electo de EE.UU., Donald Trump, de postular a la excongresista Tulsi Gabbard para el puesto de directora de Inteligencia Nacional, el Centro para la Lucha contra la Desinformación (CPD, por sus siglas en ucraniano) del Consejo de Seguridad Nacional y Defensa de Ucrania borró las publicaciones críticas que mantuvo por años contra ella en las redes sociales.
El medio ucraniano Strana publicó capturas de pantalla de las publicaciones eliminadas en la mañana de este jueves de la pagina de Telegram del centro, en las que se acusa a Gabbard de manipulación y desinformación y de trabajar para Moscú.
Así, en uno de los posts, publicado el 6 de abril de 2022, el CPD afirmaba que Gabbard “lleva varios años trabajando para el público extranjero, a sueldo del Kremlin“. Argumentaba que la excongresista había dicho en la televisión estadounidense que Washington tiene la culpa del estallido de las hostilidades en Ucrania. Además, el centro sostuvo que Gabbard “ha sido acusada en repetidas ocasiones de tener vínculos” con el presidente ruso, Vladímir Putin.
El 9 de noviembre de 2023, el centro la acusó de “manipulación” por haber dicho que el líder del régimen de Kiev, Vladímir Zelenski, “ha tomado el control de los medios de comunicación [ucranianos], ha prohibido los partidos políticos de la oposición y la Iglesia ortodoxa ucraniana”.
En otra publicación, fechada el 16 de febrero de 2023, Gabbard figura entre las personalidades públicas que “han expresado anteriormente una retórica prorrusa“.
El 25 de junio de 2024, el centro citó las palabras de Gabbard sobre la ilegitimidad de Zelenski debido a la expiración de su mandato presidencial el 20 de mayo. “Esta declaración es un intento más de desacreditar al presidente de Ucrania, como parte de la campaña de desinformación de Rusia sobre su supuesta ilegitimidad“, escribió el CPD.
Al mismo tiempo, la página de la futura directora de Inteligencia Nacional de EE.UU. todavía figura entre las acusaciones del polémico portal radical ucraniano Mirotvorets, donde se publican datos personales de aquellos que son considerados enemigos del país. Fue incluida allí en abril de 2022 como “agente de los servicios de seguridad rusos”.
