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Un documento presupuestario del Pentágono revela que “el alto volumen de misiones de fuego de artillería ha creado una demanda sin precedentes”, por parte de Kiev, de tubos de cañón para obuses remolcados M777 de 155 mm.
El Ejército de EE.UU. se está movilizando para establecer una segunda fuente de producción de cañones para obuses remolcados M777 de 155 mm, en respuesta a lo que denomina “demanda sin precedentes” por parte de Ucrania. Tan solo una empresa propiedad del Gobierno estadounidense fabrica esos cañones y actualmente no puede satisfacer una necesidad de más de 30 nuevos cada mes, informó este martes el portal The War Zone, citando un documento presupuestario del Pentágono.
Según el medio, el documento, con fecha de 17 de diciembre de 2024, muestra que para ese esfuerzo se reasignaron 161 millones de dólares al Ejército, procedentes de un Fondo de Transferencia para el Reemplazo en Ucrania, dentro del presupuesto del Pentágono. La ley estadounidense exige que el Ejército obtenga la aprobación del Congreso para reasignar fondos de una partida presupuestaria a otra.
“Se necesitan fondos para una segunda fuente de tubos de cañón de 155 mm […]. Eso incluye la adquisición, mejoras de fábrica, equipos de producción y herramientas, etc., en apoyo directo para las provisiones de reabastecimiento proporcionadas a Ucrania”, reza la nota. Se indica que “el alto volumen de misiones de fuego de artillería ha creado una demanda sin precedentes de tubos de cañón M776 [designación del M777] de 155 mm (calibre 39), con un requerimiento proyectado de más de 30 tubos por mes”. Se agrega que su fabricante actual, Watervliet Arsenal (WVA), con sede en el estado de Nueva York, “no ha podido satisfacer la demanda” y que la actual inversión en instalaciones proveerá “hasta 10 tubos de cañón por mes, incluidos los de gran calibre”.
¿Por qué se ‘queman’?
La vida útil de un cañón para cualquier tipo de obús depende de una variedad de factores, incluida la cadencia de disparo. Los cañones se desgastan, y la degradación del estriado y de la estructura interna en general puede provocar una reducción del alcance y la precisión, así como la posibilidad de una falla catastrófica.
Disparar un gran volumen de proyectiles en un período de tiempo relativamente corto, especialmente con cargas propulsoras completas para obtener el máximo alcance, solo puede aumentar la tasa de desgaste. Las métricas del Ejército de EE.UU. para determinar cuándo es necesario reemplazar el cañón de un M777 no están disponibles públicamente.
No está claro cuántos M777 ha recibido Ucrania de Washington y otros socios. Una hoja informativa publicada por el Pentágono el pasado diciembre simplemente revela que Estados Unidos ha proporcionado “más de 200 obuses de 155 mm“, lo que también incluye variantes del M109 autopropulsado. Las Fuerzas Armadas ucranianas también han recibido al menos otros cuatro M777 de Canadá y seis de Australia. Tampoco se ha dicho cuántos M777 se encuentran en servicio activo en Ucrania en la actualidad.
