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Trabaja siete días a la semana, pero asegura que ese ritmo le sienta más que bien y que no tiene previsto cambiar nada a corto plazo.
Una joven del Reino Unido explicó cómo consigue compaginar siete oficios o empleos completamente distintos y trabajar en todos ellos con un mínimo de días libres, sin dejar de sentirse perfectamente satisfecha con su vida. Su historia fue compartida por el Mirror y NYP.
A sus 21 años, Kloe Woodroffe se desempeña semana a semana como profesora de baile profesional, panadera, influencer, barista y niñera. También organiza excursiones en barco y trabaja para la cadena de comida rápida Subway. La chica afirmó que su ritmo laboral le va más que bien y que no piensa cambiar nada en un futuro próximo.
Trabajando siete días a la semana, Kloe gana en total unas 1.800 libras (2.360 dólares) al mes. En sus propias palabras, es “adicta a estar ocupada” y le encanta su agitado estilo de vida. Este verano se graduó en una escuela de ballet y suele pasar los fines de semana actuando o dando clases de danza.
“Bailar siempre ha sido mi primer amor, y es en lo que me siento más viva, pero también me encanta tener una agenda apretada. ¡Creo que es bueno estar ocupada!”, dijo. Suele empezar las mañanas haciendo pasteles por encargo y luego se va a trabajar en Subway o en una cafetería vecina llamada Boat Street Cafe.
Entre una cosa y otra, comparte activamente su vida laboral en las redes sociales, incluidos los progresos en la renovación de su embarcación, un bote recientemente adquirido en el que además planea vivir. “Me mantiene motivada y me da una sensación de logro. Quiero ampliar mis horizontes y seguir creciendo. También espero viajar por el mundo y compartir esas experiencias con mi público”, comentó.
No contenta aún, mencionó en uno de sus videos que se propone aceptar dos trabajos más: ayudante de cocina y limpiadora por las mañanas. Asimismo, dijo que espera poder algún día devolver algo a su comunidad, como abrir un comedor social o un banco de alimentos en el futuro. Contó que sus padres, con los que de momento vive, la apoyan. “Los dos piensan que es una locura, pero están orgullosos de lo que estoy consiguiendo”, concluyó Kloe.
