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Decenas de sismos sacudieron el sábado la zona sureste de la península de Reykjanes, Islandia, cerca de la localidad de Grindavík, mientras las autoridades advertían de que habían aumentado las probabilidades de una erupción volcánica.
Las autoridades emitieron una alerta naranja para Reykjanes, señalando que se había iniciado una intrusión de magma justo al este de la ciudad de Sýlingafell. Según la agencia de noticias RUV, este sería el lugar más probable donde ocurriría una erupción.
El medio informó que se ha ordenado la evacuación de las localidades cercanas de Grindavík y Svartsengi. La laguna Azul, una popular atracción turística de la zona, también ha sido evacuada. En caso de producirse una erupción, sería la cuarta desde finales de 2023. La primera tuvo lugar el 18 de diciembre, la segunda el 14 de enero y la tercera el 8 de febrero.
