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La medida ya fue criticada por el Gobierno de Luis Arce.
La provincia de Salta, ubicada en el norte de Argentina, confirmó que construirá un muro de 200 metros de largo y 3,5 metros de altura en la frontera con Bolivia para evitar la migración irregular y el contrabando.
El Boletín Oficial de Salta publicó este lunes el llamado a licitación del “alambrado perimetral”, que prevé situarse en una zona fronteriza que arrastra añejas polémicas por el paso de personas y de mercancías. La adjudicación de la polémica obra se conocerá el 4 de febrero.
La cerca, que incluirá alambres de púas y postes de hormigón, se construirá en Aguas Blancas, la ciudad argentina que colinda con la boliviana Bermejo, y en donde se encuentra uno de los cuatro pasos fronterizos que comparten ambos países en sus 742 kilómetros de frontera común.
Virginia Cornejo, directora Nacional de Vigilancia y Control de Fronteras del Ministerio de Seguridad, le explicó al diario salteño El Tribuno que el muro es necesario porque del lado boliviano se construyeron “controles estrictos”, mientras que en la parte argentina no hay delimitaciones claras.
Espaldarazo gubernamental
Este lunes el Ministerio de Seguridad manifestó que la cerca “refuerza los controles exitosos implementados” desde el inicio del ‘Plan Güemes’, un operativo que apunta a combatir el narcotráfico, el sicariato, el contrabando y la trata de personas.
“En Argentina mandan la ley y el orden. Contra el narcotráfico, ni un paso atrás”, enfatizó el Ministerio de Seguridad de la Nación argentina en un comunicado oficial.
Desde el Gobierno Nacional impulsamos la cerca en Aguas Blancas para cuidar a los argentinos del narcotráfico. Por eso, con el Plan Güemes incorporamos una nueva medida de refuerzo al control en la frontera, que se encontraba completamente descontrolada. https://t.co/gPPdB6eWnY
— Patricia Bullrich (@PatoBullrich) January 27, 2025
Un texto fue compartido por la titular de la cartera, Patricia Bullrich, quien reconoció que desde el Gobierno impulsan la cerca en Aguas Blancas para “cuidar a los argentinos del narcotráfico”.
“Por eso, con el ‘Plan Güemes’ incorporamos una nueva medida de refuerzo al control en la frontera, que se encontraba completamente descontrolada”, señaló.
“Preocupación”
La falta de regulación, aseguró Cornejo, provocó un caos en el ingreso de personas y mercancías pero, en cuanto se construya la cerca, el paso fronterizo quedará más ordenado.
Sin embargo, en el país vecino manifestaron su desacuerdo de inmediato. “Bolivia expresa su preocupación ante el anuncio del Gobierno de Argentina de instalar una cerca de 200 metros en la frontera entre ambos países”, señaló un comunicado de la cancillería.
También advirtió que los temas fronterizos deben ser tratados por medio de mecanismos de diálogo bilaterales, que están establecidos entre los Estados para encontrar soluciones coordinadas a temas en común.
“Cualquier medida unilateral puede afectar la buena vecindad y la convivencia pacífica entre pueblos hermanos (…) Bolivia solicitará a través de los canales diplomáticos la información sobre este tema para emprender las acciones que correspondan”, anunció el Gobierno de Luis Arce.
