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El Gobierno de Venezuela rechazó este viernes el informe “vulgar y panfletario” presentado por un grupo de países ante el Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas (ONU), al considerar que fue “redactado por una misión ilegítima, politizada e ideologizada, creada por el cartel de gobiernos del fracasado Grupo de Lima, con el único objetivo de cumplir con órdenes emanadas desde Washington”, según se lee en un comunicado difundido en Telegram por el canciller Yván Gil.
El texto recalca que “la persistencia” de la referida misión “es una muestra clara de la errática deriva a la que están llevando las instituciones del sistema de Naciones Unidas”, que a juicio de Caracas se han convertido en “instrumentos de coerción y chantaje a los pueblos y gobiernos soberanos”. Del mismo modo, rechazan la inacción de esas instancias para abordar las “verdaderas acciones de lesa humanidad como el genocidio en Palestina, aplicado por el Estado de Israel y apoyado por los gobiernos de EE.UU. y la Unión Europea”.
Adicionalmente, Caracas reclamó que tanto el Consejo como el alto comisionado de Derechos Humanos de la ONU han ignorado sistemáticamente sus denuncias relativas a intentos de magnicidio y “tentativas de invasiones con grupos de mercenarios”, así como “los perniciosos efectos de las medidas coercitivas unilaterales en el goce de los derechos fundamentales del pueblo venezolano”.