Publicado:
La tecnología Myofiber, aplicada por la compañía polaca Clone Robotics, utiliza músculos artificiales para mover el esqueleto, uniéndolos a puntos óseos precisos.
La empresa polaca Clone Robotics publicó un nuevo video de su proyecto del robot humanoide Clone Alpha, el “primer androide musculoesquelético bípedo del mundo”, que en su estructura y apariencia imita a un humano.
En lugar de motores, el artilugio presenta músculos artificiales, un sistema vascular hidráulico y un esqueleto de polímero.
Este año está previsto lanzar un total de 279 unidades de la edición limitada, y se utilizaría como asistente robótico en la vida cotidiana.
Mientras empresas como Tesla desarrollan robots para tareas domésticas, Clone Robotics se centra en la robótica biomimética, con órganos sintéticos y músculos artificiales, que imitan las estructuras anatómicas humanas, con el objetivo de lograr movimientos similares.
Fundada en 2021, la compañía comenzó creando una mano robótica con huesos y músculos artificiales, diseñada para imitar la funcionalidad humana. Su pulgar gira e incluso puede atrapar una pelota con facilidad. A partir de esto, la empresa desarrolló un torso humanoide con características realistas, incluido un codo móvil, una columna cervical y articulaciones de hombros realistas.
Hello World! 🌎 At Clone, we are making synthetic humans, starting with a 1:1 copy of the human hand. Here’s the Clone Hand’s first manipulation demonstration, manually preprogrammed in a few hours! pic.twitter.com/NoKETKqdYv
— Necromancer (@dhanushisrad) February 22, 2023
El sistema muscular de Clone utiliza Myofiber, una tecnología de músculos artificiales introducida por la empresa en 2021, para mover su esqueleto. Funciona uniendo músculos a puntos precisos de los huesos. El sistema nervioso artificial de Alpha está diseñado para el control instantáneo de los músculos, utilizando únicamente retroalimentación propioceptiva (es decir, saber la posición exacta de las partes del cuerpo en cada momento).
Clone Alpha posee cuatro cámaras de profundidad en el cráneo para la visión, 70 sensores inerciales que detectan la posición y el movimiento del cuerpo y 320 sensores de presión que brindan retroalimentación de fuerza.
El cerebro de la IA está entrenado en el algoritmo llamado Telequinesis, que se utiliza para aprender y dominar habilidades, como dar la mano, servir bebidas, preparar sándwiches, lavar la ropa, pasar la aspiradora, encender y apagar las luces, poner la mesa, cargar y descargar el lavavajillas e incluso entablar diálogos.