Publicado:
Se espera que Pekín complete la transición de liderazgo, incluido el nombramiento de un nuevo primer ministro en una sesión legislativa anual clave que arrancará este fin de semana.
El presidente de China, Xi Jinping, ha prometido que llevará a cabo una reestructuración gubernamental “contundente” que tendrá una “profunda influencia” en la economía y la sociedad de su país, según comentó durante una reunión del Comité Central del Partido Comunista de China (PCCh) celebrada este martes, informan medios locales.
“El XX Congreso del partido ha dado instrucciones claras sobre la reforma de los institutos estatales y del partido, y la profundización de la reforma del sistema financiero, completando el liderazgo concentrado del partido sobre la tecnología”, afirmó el mandatario.
En este sentido, aseguró que se implementarán una serie de medidas de reforma “estratégicas” e “innovadoras” en un futuro próximo, detallando que es menester lograr nuevos avances en áreas importantes y factores clave, y pidió a los asistentes “cumplir con los objetivos de este año”.
Asamblea Popular Nacional
Asimismo, indicó que el plan para reformar varios órganos del PCCh y departamentos gubernamentales aprobado este martes se dará a conocer durante la sesión anual de la Asamblea Popular Nacional (APN) —el máximo órgano legislativo chino—, que comienza este domingo.
Esta reforma, que busca fortalecer la dirección del partido, involucrará a las instituciones locales y centrales del PCCh, la APN, el Consejo de Estado o el gabinete de China, así como a la Conferencia Consultiva Política del Pueblo Chino (CCPPCh), el máximo órgano asesor de la nación, cuya sesión anual empezará un día antes que la de la Asamblea Popular Nacional.
Conocidas como las ‘dos sesiones’ de China, las reuniones anuales de los principales órganos asesores legislativos y políticos reúnen a líderes clave para discutir propuestas y votar legislaciones, ofreciendo ideas sobre las medidas de reforma del gobierno y su dirección futura.
Se espera que este año Pekín complete la transición de liderazgo, con una reorganización de los principales puestos gubernamentales, incluido el nombramiento de un nuevo primer ministro, al tiempo que se aguarda que Xi asegure un tercer mandato como presidente.