El Gobierno de Nicaragua emitió este viernes un comunicado en el cual expresa su repudio y rechazo a la decisión del Secretariado del Fondo Verde del Clima de cancelar el financiamiento al Proyecto Bioclima, al considerar que esa decisión fue tomada a través de procesos y procedimientos no transparentes y prácticas no éticas.
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El proyecto tenía como objetivo contribuir a la protección y defensa de las reservas de biosfera de Bosawas e Indio Maíz mediante la reducción de la deforestación, el aumento de la reforestación y el fortalecimiento de la resiliencia de estas importantes reservas
“El pueblo nicaragüense y sus instituciones han sido ejemplares en la misión de cuidar la Madre Tierra. Nicaragua fue el primer país en suscribir la Declaración Universal de los Derechos de la Madre Tierra y la Humanidad. Además, se reconoce y respeta los derechos de propiedad de las comunidades originarias y afrodescendientes, habiendo demarcado y titulado 25 territorios de los pueblos originarios, lo que equivale al 31.6% del territorio nacional”, externó la nota oficial.
“Hemos entregado a las comunidades originarias y pueblos originarios el 31.6% de nuestro territorio, equivalente a 38,426 kilómetros cuadrados. Esto es una demostración más del fortalecimiento de los derechos de estas comunidades en nuestro país”, agregó.
Mencionó que desde la presidencia de Daniel Ortega, se ha realizado la mayor inversión social e infraestructural en la historia de Nicaragua para mejorar la calidad de vida de todas las familias nicaragüenses, especialmente aquellas que históricamente fueron excluidas. Se han desarrollado programas en educación, salud, vivienda, agua y saneamiento, seguridad ciudadana, fomento de la pequeña y mediana producción, energía, vialidad, entre otros, con un esfuerzo sostenido de protección y defensa de los recursos naturales, el medio ambiente y la biodiversidad.
Por lo tanto, el Gobierno de Nicaragua “denuncia las medidas agresivas, coercitivas y unilaterales de esta institución, que han violado los principios y acuerdos suscritos ante la comunidad internacional. Estos acuerdos están destinados a defender la naturaleza, adaptarse y mitigar el cambio climático, y garantizar la transformación de la vida de los pueblos originarios y afrodescendientes sin dejar a nadie atrás”.
“Exigimos al Fondo Verde del Clima que garantice la movilización de los recursos comprometidos por la comunidad internacional y que han sido arrebatados a los pueblos originarios y afrodescendientes de Nicaragua. Estos recursos deben utilizarse para abordar los desafíos y las múltiples crisis que enfrenta la humanidad, como el cambio climático provocado por los países más ricos, que son los mismos que agreden a nuestros pueblos originarios, Mískitos, Mayagnas, Creoles, Garífonas, Ramas, Ulwas, Sumos y Mestizos”, puntualizó el comunicado.
“Son estos mismos países ricos los que han agredido y han intentado acabar con los derechos de cada uno de estos pueblos y comunidades originarias que forman parte de Nicaragua, de los cuales nos sentimos sumamente orgullosos porque somos nosotros mismos”, aseveró.