El fiscal superior Rafael Vela, coordinador del equipo especial Lava Jato, advirtió que existe el riesgo de que la investigada Eliane Karp pueda eludir a la justicia peruana luego de que su esposo, el expresidente Alejandro Toledo, sea entregado al Perú en los próximos días para ser procesado por el Caso Odebrecht.
En diálogo con El Comercio, consideró que es “indispensable” que las autoridades de Estados Unidos tomen medidas para asegurar su permanencia en ese país de cara a su propio proceso de extradición por el Caso Ecoteva. Por este, la fiscalía peruana solicita 16 años y 9 meses de prisión para Eliane Karp y para el propio Alejandro Toledo.
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“Es evidente que la entrega del señor Alejandro Toledo genera un decaimiento del arraigo de la señora Eliane Karp y como tal, habría que garantizar de que la señora Karp no eluda la justicia”, declaró.
En esa línea, el fiscal recordó que la esposa del exmandatario, acusada por presunto lavado de activos, también tiene la nacionalidad belga y que Bélgica “no extradita a sus connacionales”. “Si la señora Eliane Karp logra salir de los Estados Unidos hacia Bélgica, no vamos a poder extraditarla y se generaría impunidad evidente dentro del caso […] Es posible que también pueda buscar como un destino Israel, donde también hay dificultades para extraditar a sus connacionales”, indicó.
Fue el fiscal Rafael Vela quien, en junio del 2019, presentó la acusación penal contra el expresidente y su esposa por la presunta comisión del delito de lavado de activos en el Caso Ecoteva. Previamente, en abril del 2017, el Poder Judicial había dictado órdenes de 18 meses de prisión preventiva contra la pareja mientras eran parte de esa investigación.
Desde esa orden de prisión se inició el camino para solicitar la extradición de ambos por ese caso, la cual corre en paralelo a la del Caso Interoceánica, que solo incluye a Alejandro Toledo como presunto receptor de millonarias coimas de Odebrecht. Este caso avanzó más rápido y resultó en la concesión de la extradición para el exmandatario comunicada este martes a las autoridades peruanas.
En el caso de la extradición a Eliane Karp por el Caso Ecoteva, remarcó que esta ya fue aprobada a nivel de las autoridades peruanas y está en manos de Estados Unidos. “Ellos tiene que decidir. Con el mismo trámite que sucedió con Alejandro Toledo [en el Caso Odebrecht-Interoceánica], tendrá que generarse contra ambos [por Ecoteva]: el señor Toledo y la señora Karp. En el caso del señor Toledo, determinará una ampliación de su extradición; y en el caso de la señor Karp sí una extradición por el Caso Ecoteva”, manifestó.
Así, serían las autoridades estadounidenses las que podrían pedir medidas restrictivas contra Eliane Karp mientras se tramite su propia extradición. “De la misma manera en que sucedió con el señor Toledo, efectivamente. Hay un riesgo plausible de que pueda eludir la acción de la justicia […] Dentro de esa perspectiva, resulta indispensable que las autoridades norteamericanas puedan generar los niveles de arraigo y aseguramiento de la presencia de la señora Karp para el proceso de extradición conjunto”, agregó el fiscal.
Demora en llegada dependerá de si Alejandro Toledo se entrega
Con respecto a cuánto pasará desde la concesión de la extradición de Alejandro Toledo al Perú, anunciada este martes, hasta que el expresidente ya esté en territorio peruano, Rafael Vela indicó que “es difícil especular sobre una cantidad precisa de días”: “Depende no solo de la decisión del gobierno de EE.UU., que ya se comunicó, si no también de la voluntad del señor Toledo de ponerse a disposición de las autoridades”.
El coordinador del equipo especial Lava Jato indicó que Alejando Toledo ya fue notificado de la decisión y explicó que si decide entregarse, el proceso sería más rápido y solo quedarían por hacer trámites documentario y coordinaciones de seguridad para la entrega el Perú. En ese escenario, el expresidente podría estar en el país “en el transcurso de unos días”.
“El otro escenario es que el señor Toledo no quiera ponerse a disposición. En ese caso, las autoridades norteamericanas tienen que generar la orden de aprehensión contra él. Esta gestión, que debe hacerse ante un juez, materializaría que sea puesto a seguridad por la fuerza. Eso, al tratarse de una decisión judicial, es relativo poder especular cuánto tiempo pueda tardar. Pero debería ser de inmediato también, porque no hay ninguna discusión pendiente”, dijo.
Rafael Vela remarcó que esto no depende de las autoridades peruanas, sino que sigue en manos de las autoridades estadounidenses. “Estamos a la espera, sí, de cualquier coordinación administrativa […] Nosotros ya no tenemos nada pendiente. Lo único que quedaría es su entrega física, pero estamos a la expectativa de facilitar lo que a nosotros se nos requiera para que finalmente llegue al Perú lo más pronto posible”, aseguró.