La República Dominicana enfrenta nuevamente una crisis en el suministro eléctrico, situación que afecta a miles de ciudadanos y genera un creciente malestar en el país.
Tras varios meses recibiendo un servicio de energía estable, los dominicanos padecen una vez más prolongados cortes en el suministro eléctrico, lo que genera gran irritación entre la ciudadanía.
En esta ocasión, las autoridades han señalado que los apagones obedecen a que en muchas localidades las pérdidas por energía servida superan el 50 % y con la medida buscan reducir el déficit. Ciudadanos y comerciantes deploran la disposición señalando que quien paga su factura no puede recibir el mismo trato que aquel que se roba la electricidad.
Los dueños de negocios se quejan además por las pérdidas que le provocan las suspensiones en el servicio energético, ya que tienen que buscar alternativas para evitar el deterioro de los productos que requieren refrigeración.
Las pérdidas en el sector eléctrico obligan al Estado a destinar un subsidio anual que ronda los 1,500 millones de dólares, una cifra que, según expertos, resulta insostenible para las finanzas públicas.
Mientras tanto, los ciudadanos señalan que si el problema continúa, a partir del mes de marzo, cuando empiecen a aumentar las temperaturas, la situación podría ser verdaderamente insoportable.
Stephanie Andújar, Santo Domingo.
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