El objetivo de algunos gobiernos y empresas es que aumente el interés y, por tanto, las ventas de coches eléctricos. Sin embargo, un estudio realizado por Deloitte concluyó que el interés por los coches de combustión está creciendo, frente a los eléctricos.
La empresa de consultoría y auditoría Deloitte llevó a cabo un estudio encuestando a 27.000 consumidores, mayores de edad para conducir, en 26 países.
En línea con lo que algunos actores de la industria han defendido, el Estudio Global de Consumidores Automotrices 2024 de Deloitte concluyó que el interés por los autos eléctricos está disminuyendo en los principales mercados, como Estados Unidos y Alemania.
Entre las conclusiones, se destaca que el interés por los vehículos eléctricos está decayendo, y existe un creciente interés entre los consumidores por los coches de combustión. Esto último es particularmente visible en Estados Unidos (67% frente a 58% en 2023), el sudeste asiático (52% frente a 50%) y Alemania (49% frente a 45% en 2023).
Según Deloitte, los elevados tipos de interés y los elevados precios pueden estar perjudicando el atractivo de los coches eléctricos en algunos mercados.
La desaceleración del desarrollo de los vehículos eléctricos aún no es muy visible en Europa, donde las ventas han registrado importantes tasas de crecimiento anual, al menos para los modelos híbridos y de batería (37% y 30% en 2023 respecto a 2022).
Recuerda Deloitte, basándose en datos de la Asociación Europea de Fabricantes de Automóviles (en inglés, ACEA).
El estudio también concluyó que los criterios para elegir un vehículo varían ampliamente entre mercados:
- En los mercados desarrollados, como Alemania, Japón y Estados Unidos, el precio es el principal factor en la elección de los consumidores de su próxima marca de automóvil, con porcentajes que oscilan entre el 55% y el 59%;
- En India y el Sudeste Asiático, la calidad del producto es una prioridad, con un 65% y un 62%, respectivamente.
- En China y Corea del Sur, el rendimiento del vehículo encabeza la lista de criterios de compra, con el 53% y el 55% de los encuestados, respectivamente.
La disposición a pagar por las características de la tecnología de conectividad también varía según los mercados. El nivel más alto se registró en países como India, China y el Sudeste Asiático, y el nivel más bajo en países como Alemania, Japón y Estados Unidos.
Los compradores de electricidad se ven influenciados por menores costos de carga en países como Estados Unidos (66%), Japón (62%) y Alemania (50%), así como preocupaciones ambientales y menores costos de mantenimiento en lugares como India (68% y 56%, respectivamente).
La mayoría de los consumidores encuestados están preocupados por el impacto ambiental de las baterías, destacando la necesidad de prácticas sostenibles en el uso y reciclaje del componente. Además, el compromiso de las marcas con la sostenibilidad es valorado por los consumidores de diferentes regiones.
Sin embargo, en la mayoría de los mercados encuestados, la razón principal por la que los consumidores pretenden comprar un vehículo electrificado es un fuerte deseo de reducir sus costos de funcionamiento, por encima de las preocupaciones sobre el cambio climático global.
Los datos recopilados sobre los vehículos eléctricos resaltan preocupaciones comunes con las que ya estamos familiarizados: tiempo de carga, autonomía, precio y costos de reemplazo de la batería.