El Bloque de Resistencia y Rebeldía Popular (BRP) de El Salvador ratificó este viernes su rechazo al Régimen de Excepción impuesto por el Gobierno encabezado por el presidente Nayib Bukele mientras apuntó que este ha sido un año complejo para los sectores populares.
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La representante del BRP, Marisela Ramírez, señaló que el Régimen de Excepción vigente desde hace nueve meses constituye una arremetida contra la población civil para criminalizar a los sectores más vulnerables.
En este sentido, la dirigente destacó que durante este periodo las fuerzas del Gobierno han asesinado a 100 personas, entretanto, precisó que se han registrado arrestos arbitrarios y hechos sumamente violentos.
Al mismo tiempo, Ramírez afirmó que la medida tiene el objetivo de frenar el descontento popular acumulado por las medidas neoliberales a través del miedo, en cambio, enfatizó, el Gobierno manipula la violenta situación argumentando una supuesta lucha por la seguridad.
En consonancia, expresó que “este gobierno llegó a controlar el Estado con un discurso y promesas grandísimas que no se han cumplido y le sigue mintiendo al pueblo. Las organizaciones estamos vigilantes y no creemos en su discurso populista”.
De igual forma, la dirigente recalcó que “el desgaste político sufrido por la oposición a través de la campaña mediática financiada con las arcas del Estado, es una batalla dura la que vamos a enfrentar en este año preelectoral, no hay un instrumento político que pueda darle la batalla”.
A partir de ello, la miembro del BRP manifestó que “la única salida a los movimientos sociales y populares, de este embate neofacista es la conformación de un Frente Amplio, donde todas las fuerzas de oposición puedan concluir para dar la batalla política”.
